La reunión entre los dirigentes de Central y el representante de Edgardo Bauza, Darío Bombini, se postergó para hoy por la mañana, jornada en la que podría definirse la continuidad del Patón al frente del plantel canalla.
A propósito de la decisión, el titular de River, David Pintado, aceptó incluir ayer al técnico auriazul en una lista de probables candidatos a sustituir a Américo Rubén Gallego.
Ante la consulta de los medios porteños sobre las chances del uruguayo Hugo De León, Juan José López, Oscar Ruggeri, Mario Kempes y Edgardo Bauza, el mandamás millonario dijo que todo puede ser. Con algunos ya se charló, pero no hay definiciones. Todos los nombres son posibles, sentenció.
Lo cierto es que la respuesta no hace más que alejar un poco más a Gallego de su cargo e inmediatamente establece una escala de prioridades que los dirigentes de la banda roja conservan en el más estricto secreto.
Otro rumor nacido unos cuantos días antes, también vincula a Bauza con San Lorenzo si Ruggeri es tentado por River. En ese caso -no muy alejado de las probabilidades-, el actual técnico canalla y Ricardo Gareca se transformarían inmediatamente en los candidatos de la entidad de Boedo que preside Fernando Miele.
Especulación más, lucubración menos, el actual cuerpo técnico auriazul continúa muy cerca de extender su vínculo con la entidad de Arroyito y la postergación del cónclave, que se desarrollará hoy a las 10 en las oficinas del protesorero canalla Eduardo Liberati.
El cuerpo técnico canalla gana unos 800 mil dólares anuales, una cifra que, sin ninguna discusión, escapa a la realidad de la mayoría de los clubes argentinos. Obviamente, también a la de Central. El club tiene un déficit mensual de 400 mil dólares; obviamente, cualquier proyecto de crecimiento institucional y deportivo es inviable con esos números.
El presidente Víctor Vesco se comprometió oportunamente a recortar los salarios más altos para tratar de encauzar, de una vez por todas, las cuentas del club. Ello comprende al cuerpo técnico, primas y salarios del plantel. Ahora resta saber si los dirigentes cumplen con su palabra y llevan adelante el ajuste, y si Bauza lo acepta.
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La Ciudad
