La Defensoría del Pueblo porteña solicitó al Instituto Nacional contra la Discriminación, el Racismo y la Xenofobia (Inadi) que determine si el Ministerio de Desarrollo Social discrimina a los ancianos pobres e indocumentados en la entrega de ayudas alimentarias.
La Defensoría indicó que la exigencia del ministerio a los ancianos de que presenten el documento nacional de identidad (DNI) podría constituir un acto de exclusión y habría varias decenas de personas que fueron rechazadas por no contar con esa documentación.
Las personas que no poseen un documento de identidad tienen el mismo derecho a la alimentación y las mismas necesidades básicas que aquellos que cuentan con documento, sostuvo la Defensoría, y prosiguió con que si a igualdad de condiciones no corresponde igualdad de derechos, la política del Ministerio resulta discriminatoria en virtud de que el derecho alimentario es un derecho humano y, como tal, universal.
A la vez la ombudsman porteña, Alicia Oliveira, observó supuestas irregularidades en la implementación del Programa Unidos y le reclamó al ministerio a cargo de Graciela Fernández Meijide que regularice la ayuda prevista en ese operativo.
Ayuda para quienes no tienen cobertura
El Programa Unidos contempla 1.000 cupos de ayudas alimentarias para otras tantas personas mayores de 60 años sin cobertura social y, según la defensora, suelen pasar más de dos meses de una entrega a la otra.
Las personas mayores de 60 años sin cobertura social a las que el Programa Unidos está dirigido, sufren la incertidumbre de no saber cuándo será la próxima entrega de los módulos; el Estado ha generado en ellos una expectativa y una extrema dependencia, dijo.
La entidad sostuvo que su presentación se basaba en informes de la organización católica Cáritas Buenos Aires -encargada de la distribución de los alimentos-, que señaló las falencias y las demoras del Programa Unidos a cargo del Ministerio de Desarrollo Social. El organismo a cargo de Oliveira indicó que en la actualidad, según lo informado por Cáritas, existen 150 personas en lista de espera y 70 rechazadas por no contar con documento de identidad.