Minutos antes de comenzar a sesionar el 43er. plenario del CIN, un grupo de docentes agremiados en la Conadu distribuyó entre los rectores presentes un extenso documento, donde se detalla la varias veces planteada situación laboral de los docentes universitarios. Entre los puntos salientes, el texto elaborado por la Conadu expresa: Estamos frente a una de las crisis financieras más complejas de la universidad pública, al punto tal que de persistir la misma y no encontrar los responsables de las políticas de Estado, programas y proyectos pertinentes, su arancelamiento y privatización son sólo una cuestión de tiempo.
Dirigida al presidente del CIN, Mario Barletta, la nota del gremio de los profesores universitarios circuló en manos de los rectores de todo el país. En la misma manifiestan su preocupación por haberse aprobado para el año próximo el mismo presupuesto que el del 2000, lo cual ignora la acuciante situación de postergación salarial y laboral de los docentes universitarios, según expresan.
Al describir el cuadro laboral y salarial recordaron a los rectores reunidos en el CIN que sus salarios se encuentran congelados desde 1992, y que el 70% cobra menos de 160 pesos al mes, con un promedio de 1,40 y 3,50 pesos la hora de trabajo; en tanto que el 15% aproximadamente trabaja ad honórem. El documento culmina con el planteo de una serie de reclamos, entre ellos un incremento salarial de emergencia de 100 pesos para el cargo testigo distribuido según nomenclador y el pago del incremento salarial de 60 pesos mensuales por cargo a los docentes preuniversitarios, remunerativos, bonificables y retroactivos al 1º de enero de 1999.
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La Ciudad
