El tribunal Criminal Nº3 de Lomas de Zamora absolvió ayer a Raúl Castells -líder del Movimiento Independiente de Jubilados y Pensionados bonaerense- de las acusaciones de extorsión contra un supermercado de Banfield. En tanto, a pesar de ser condenado a dos años de prisión efectiva como autor del delito de coacción contra otro supermercado de Avellaneda, el dirigente -que estuvo detenido últimamente con arresto domiciliario- recuperó en la tarde de ayer su libertad luego de que la Justicia decidiera dejar sin efecto su detención y quitarle la tobillera electrónica que controlaba sus movimientos mientras estuvo arrestado en su casa.
El fallo que condenó al dirigente jubilado fue criticado con dureza por Carlos Perro Santillán y los sindicalistas de la CGT disidente Hugo Moyano y Julio Piumato.
Pasado el mediodía de ayer, fue leída la sentencia a Castells que le permitió al dirigente recuperar su libertad (ya había cumplido más de los dos tercios de su condena antes del juicio).
En forma unánime los jueces Jorge Camino, Guillermo Rolón y Rafael Villamayor decidieron absolver a Raúl Castells en la causa iniciada por el supermercado Disco de Banfield, ya que no se pudo probar que fuese él quien lideraba a las 150 personas que en marzo de 1997 se congregaron en el local para pedir comida.
Del mismo modo, los jueces condenaron a Castells a dos años de prisión efectiva -de los cuales ya había cumplido en su domicilio 23 meses, controlado por una tobillera electrónica- por el delito de coacción que cometió el 23 de diciembre de 1998 cuando fue a pedir con más de 300 personas comida a la sucursal Avellaneda de la cadena Wal Mart.
Al determinar que se trataba de una coacción, los jueces indicaron que el bien jurídico que se protegía era la libertad, dado que el dirigente profería diversas amenazas por megáfono y en diálogo con directivos del supermercado para ocupar el sitio. El tribunal también indicó que la ilicitud radicaba en el modo de exigir y no en el reclamo en sí y, ante el planteo de la defensora María Fernanda Mestrín sobre el derecho de las personas a peticionar, señaló que no era legítimo en ese caso porque según la Constitución Nacional los reclamos deben ser dirigidos a las autoridades públicas y no a un particular.
Reclamo a los grupos económicos
Castells, cuya primera acción en libertad fue reunirse con unas 250 personas que fueron a su casa de Banfield a saludarlo, aseguró que vamos a pedir al poder político que solucione el problema de unas cinco millones de personas sin trabajo y unos cuatro millones de jubilados.
Siempre combativo, el dirigente agregó que de no encontrar una respuesta, el reclamo se extenderá inmediatamente a los grandes grupos económicos y supermercados internacionales que son corresponsables de las penurias que pasa nuestro pueblo.
Por su parte, Carlos Santillán confirmó la iniciativa al asegurar que se realizará en la mañana del 24, primero se irá a hacer este pedido de mercadería al gobierno y, si no responde, se irá a los supermercados. Sin embargo, Castells no participará de este reclamo porque hasta el 29 de enero se encuentra bajo libertad condicional.