El municipio continúa recopilando nuevas muestras en el Paraná a propósito de la contaminación fecal que se registra a la altura de los balnearios La Florida y rambla Catalunya. Además, el intendente Hermes Binner salió al cruce de las declaraciones efectuadas por el subsecretario de Medio Ambiente provincial, Lorenzo Domínguez, al considerar que el funcionario incurrió en un acto provocativo al ventilar análisis bacteriológicos que revelan altos índices de contaminación fecal y proponer con esto la prohibición de bañarse en las playas de La Florida y la rambla Catalunya. El Ejecutivo insistió ayer con su postura de garantizar la aptitud del agua del Paraná para fines recreativos. La directora de Epidemiología municipal, Mónica Livorio, reveló a La Capital que se han recepcionado en las últimas horas dos informes de la Facultad Católica de Química y del laboratorio Greenlab, en los que los resultados coinciden con las muestras efectuadas por los técnicos municipales. Ambos análisis presentan muy poca variabilidad respecto de los efectuados anteriormente. El laboratorio privado tomó las muestras el 9 de diciembre, mientras que la Universidad hizo lo propio el 6 con seis muestras en la zona, detalló Livorio. Ayer por la mañana técnicos del Instituto del Alimento efectuaron otra serie de muestras. En rigor, creo que hay una provocación de sectores que realmente quieren sembrar un clima de preocupación en la ciudad de Rosario y esto tenemos que terminarlo, aseguró visiblemente enojado Binner. Pero el intendente le achacó el acto provocativo al propio Lorenzo Domínguez, a quien le lanzó: Que venga a dar la cara y no mande notas como quien tira la piedra y esconde la mano, si quiere hacer muestras (en la zona de balnearios) yo lo acompaño. Y es una excelente oportunidad para decirle que tenga en cuenta a los vecinos de Rosario, que venga a la ciudad, que hagamos juntos los análisis, pero que no haga estas declaraciones porque realmente le hace muy mal a los intereses de la ciudad, indicó, para rematar con un estamos cansados de las denuncias, la Municipalidad tiene la absoluta convicción de que en Rosario no hay niveles alarmantes de contaminación fecal.
| |