Optimista pese al fallo adverso

Washington. - El vicepresidente Al Gore, pese al fallo desfavorable en la Corte de Florida, declaró ayer mientras aguarda una decisión en torno a su apelación ante la Corte Suprema estatal: No me siento otra cosa que no sea optimista. En una conferencia de prensa frente a la Casa Blanca, Gore no dio señal de estar dispuesto a reconocer una derrota electoral si su apelación es rechazada.
Cuando se decidan los temas que ahora están pendientes ante la Corte Suprema de la Florida, será un momento importante, expresó, pero no voy a hacer conjeturas sobre lo que hará la Corte Suprema de la Florida. Los esfuerzos de Gore por lograr la revocación de la victoria de George W. Bush en la Florida fueron rechazados el lunes por un juez de circuito de la Florida, N. Sanders Sauls, quien también rechazó el pedido del vicepresidente de un recuento manual de los votos cuestionables en dos condados de la Florida. La apelación de Gore volverá a ventilarse mañana ante la Corte Suprema de ese Estado.
Pero Gore también insinuó con firmeza que espera que otras dos demandas, relativas a los votos de ultramar, lleguen hasta el tribunal máximo de la Florida. Pienso que es probable que todas las controversias actuales terminen zanjadas de una u otra manera en la Corte Suprema de la Florida, declaró el vicepresidente. Gore no dio la impresión de estar al borde de admitir su derrota en la puja por la Casa Blanca, en contraste con el abatimiento que reinó entre otros demócratas después del dictamen del juez.
Gore habló ante los micrófonos después que su compañero de fórmula, el senador Joseph Lieberman, había declarado que la Corte Suprema de la Florida será el árbitro final de la disputa electoral.
Los abogados de Gore pese a admitir que sufrieron una grave derrota en la Florida continuaron trabajando en la apelación. Ron Klain, uno de los abogados de Gore, expresó a la cadena de televisión NBC que el juez estatal N. Saunders Sauls cometió varios errores muy claros y pronosticó que la Corte Suprema de la Florida alterará su fallo. El juez Sauls rechazó todos los argumentos de Gore para que ordenara un nuevo recuento manual de los votos en litigio.
Ganaron ellos. Perdimos nosotros, reconoció el lunes otro abogado de Gore, David Boies, ante el amplio y demoledor fallo de Sauls. Hemos dado un paso más para solucionar este asunto, agregó Boies, aunque los asesores de Gore reconocieron que la Corte Suprema de la Florida podría ser la última opción legal del candidato demócrata.
Lo que hace falta, expresó Boies a la cadena de televisión ABC, es contar esos 14.000 votos que no fueron contados y fueron mal contados.