Año CXXXIV
 Nº 48.951
Rosario,
lunes  27 de
noviembre de 2000
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Nuevo reclamo europeo
Exigen a la Mercedes Benz alemana que responda por trece obreros secuestrados
Gremialistas metalúrgicos acusaron a la casa matriz germana por la suerte de los operarios argentinos

La desaparición de por lo menos trece obreros de Mercedes Benz durante la última dictadura militar argentina se está convirtiendo en un problema para el consorcio Daimler-Chrysler, según el periódico Berliner Zeitung que precisa que los delegados gremiales de la planta matriz de Daimler, cercana a Stuttgart, se ocuparán hoy durante una reunión de analizar la situación planteada por las desapariciones acaecidas a mediados de los setenta en la Argentina.
Los sindicalistas tienen previsto firmar una resolución de protesta en la que plantearán la cuestión de la responsabilidad que tuvo el consorcio en la muerte de sus colegas. Es un escándalo que se quiera tapar a todas luces los motivos de los presuntos asesinatos, le dijo a ese diario Tom Adler, delegado del poderoso sindicato alemán IG-Metall.
Es evidente que los directivos de la Daimler Benz AG colaboraron con la dictadura militar argentina para entregar a delegados obreros de la empresa al terror, sostuvo, por su parte, el apoderado de IG-Metall en Stuttgart, Juergen Stamm.
Por lo menos trece obreros de la planta de Mercedes Benz en la localidad bonaerense de González Catán fueron secuestrados entre abril de 1976 y agosto de 1977, según una investigación hecha en 1999 para una emisora estatal alemana sobre la colaboración de empresas argentinas en la detención y posterior aniquilación de sindicalistas entre 1976 y 1983.

Una metodología frecuente
Durante el terrorismo de Estado implementado por el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional fue una metodología harto frecuente la colaboración de la conducción empresaria de las grandes fábricas con las autoridades militares que tenían a su cargo la represión.
En las posteriores investigaciones que realizó la Comisión Nacional por la Desaparición de Personas (Conadep) quedó ampliamente demostrado, y así lo convalidó la Cámara Federal en el Juicio a las Juntas, que se produjo el secuestro masivo de las comisiones internas y cuerpos de delegados de las grandes terminales automotrices, entre ellas Mercedes Benz y Ford.
En el caso de la Ford de General Pacheco llegó a funcionar un destacamento del Primer Cuerpo de Ejército dentro del predio de la fábrica. Todos los delegados de la comisión interna fueron secuestrados y los obreros debían trabajar en la línea de montaje con soldados armados a su alrededor.
La estrecha colaboración de la Ford con la dictadura videlista se hizo extensiva al uso masivo de los tristemente célebres Falcon verdes por parte de las fuerzas de seguridad que llevaron adelante su política de exterminio de los opositores al gobierno militar.
Ahora, en el caso de la Mercedes Benz, el abogado alemán Wolfgang Kaleck entabló demanda en nombre de la Asociación de Abogadas y Abogados Republicanos de Alemania contra los ex miembros de la junta militar argentina Jorge Videla y Emilio Massera y el entonces director de la fábrica, el alemán Juan Tasselkraut, quien sigue ocupando un cargo directivo en la empresa.
Desde julio pasado investiga el caso la fiscalía de la ciudad de Nuremberg.
Tasselkraut fue acusado por un testigo de haber suministrado a las autoridades militares los nombres y las direcciones de sindicalistas que trabajaban en la planta. El directivo de Mercedes ha negado rotundamente las imputaciones.



Videla, junto con Massera, será demandado por abogados alemanes.
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