Beach volley: Conde y una deuda olímpica

El integrante de la mejor dupla argentina quiere clasificar a Beijing 2008

Rodolfo Parody / La Capital

El beach volley argentino es sinónimo de Martín Conde y Mariano Baracetti. Conforman desde hace años la pareja número uno del país y ahora se preparan para una nueva temporada internacional. Después de varios años de compartir juntos el mismo deporte, intentan disfrutar cada momento al máximo, aunque los Juegos Olímpicos aparecen como la gran deuda pendiente que esperan saldar en Beijing 2008.

"Con Mariano (Baracetti) nos llevamos muy bien y nuestras expectativas para el próximo circuito internacional son muchas. Pero a esta altura de nuestras carreras lo tomamos con tranquilidad, tratando de dar lo mejor y sin presionarnos", dice Conde, campeón mundial en Austria 2001.

El jugador de 35 años, que vive en Tenerife y se volcó de lleno al beach volley mundial en el 95, dice que el circuito "es un poco duro porque entre mayo y septiembre se juegan entre 15 y 20 etapas".

Durante este año y el próximo se definirán las parejas que participarán en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. "Nuestra meta es lograr la clasificación", sostiene.

"Los Juegos Olímpicos son nuestra gran asignatura pendiente. Si bien ya tenemos todos los títulos posibles, nos falta al menos hacer un buen papel en las Olimpíadas. Tengo tres participaciones y nunca logré jugar bien", dice Conde, quien compitió con Esteban Martínez en Atlanta 96 y Sydney 2000, y con Baracetti en Atenas 2004.

La frustración de los Juegos de Atenas despertó varias conjeturas. Se dijo que la pareja estaba peleada y que ni siquiera se hablaba durante los partidos. De una posible medalla, quedaron eliminados muy pronto y decidieron separarse.

"No hubo ningún desgaste en la pareja. Por distintas maneras de pensar de cómo prepararnos para la siguiente temporada, Mariano intentó jugar con Pedro Depiaggio y yo con José Salema. Pero al ver que no nos iba tan bien volvimos a juntarnos. La separación no pasó por un problema entre nosotros. Se puede haber dicho mucho, pero no fue cierto", asegura.

Cuenta que todavía no piensa en el retiro. "Mientras esté en un buen nivel, me gustaría seguir. No me pongo una fecha límite en mi carrera. Me siento con pilas para continuar", agrega.

No duda al mencionar el mejor recuerdo de su carrera: "El título en el campeonato del mundo de Austria 2001".