Consistente en casi todo, menos arriba

Central ratificó virtudes y defectos. Y en este camino por el cual transita ganando en consistencia demuestra que ya tiene consolidado un esquema defensivo, un sistema de volantes pero que aún debe encontrar los caminos de la contundencia. Es allí justamente, en materia ofensiva, donde los dirigidos por Don Angel no encuentran el mecanismo para desequilibrar con mayor facilidad.

Anoche la dupla ofensiva constituída por Vitti y Villa volvió a actuar en forma inconexa con el resto del conjunto.

Los delanteros canallas mostraron movilidad constante y una vocación de servicio pero ante la falta de asistencia permanente, terminaron demasiado aislados en el campo adversario, razón por la cual sus posibilidades de desequilibrar se reducen a la mínima expresión.

Es por esto entonces que la difícil misión de Don Angel y Cuffaro Russo será lograr que de tres cuartos de cancha hacia adelante aparezca una manera de proveer a sus atacantes tomando todos los recaudos habidos y por haber para que esta modificación no le quite el equilibrio que muestra en su mediocampo.

Salvo este ajuste a realizar en el andamiaje colectivo, todo lo demás en el fútbol canalla se presenta consistente. Ayer no estuvo Petaco Carbonari pero el Colorado Fassi demostró que juega con eficiencia y sin complejos. Anoche tampoco estuvo el Chacho Coudet y si bien es un elemento de importancia, los pibes se las ingeniaron para disimular su ausencia.

En síntesis, Central, con esfuerzo y denuedo, está descubriendo su identidad futbolística. La misma que le permitió confrontar con dignidad los últimos compromisos. La misma que le permitirá comenzar a construir un futuro posible al menos desde lo deportivo.

Fabricio Fuentes se sube sobre el cuerpo de Villa.