| domingo, 25 de julio de 2004 | Clásicos desconocidos. Reeditan textos decisivos de la literatura argentina Los libros que permanecieron ocultos detrás de los escritores consagrados La colección Los Olvidados rescata textos que fueron dejados de lado tanto por la academia como el periodismo Osvaldo Aguirre / La Capital Jorge Luis Borges y Roberto Arlt son desde hace mucho tiempo nombres consagrados en la literatura argentina. La canonización pasó por alto un hecho que de tan evidente se volvió invisible: "esos escritores nunca estuvieron solos, hubo pares, debates, modelos, interlocutores varios que los volvieron verosímiles", dice Víctor Pesce. Esa observación es el punto de partida de Los Olvidados, una colección de libros que apunta a rescatar a autores ignorados y poner de relieve una historia oculta de la literatura argentina.
Profesor universitario, poeta y crítico literario, Pesce es el director de Los Olvidados, una cuidada serie de textos que publica la Librería Histórica, de Buenos Aires. "Se puede hacer otra historia -dice-, otro relato no más fuerte ni más débil con otros escritores, que a su vez recuerde que el progreso ha sido en el mejor de los casos una ficción dolorosa".
Hasta el momento la colección rescató cuatro títulos publicados originalmente entre 1923 y 1926 y que se volvieron inhallables: "Tinieblas", de Elías Castelnuovo; "La manga", de Raúl Scalabrini Ortiz; "Y Jesús volvió a Buenos Aires", de Enrique Méndez Calzada, y "Tangos", de Enrique González Tuñón. Cada volumen incluye un estudio preliminar, referencias bibliográficas y una cronología de hechos históricos y culturales.
Los títulos reeditados, apunta Pesce, "persiguen el intento de rearmar un campo de escritura y lectura riquísimo como el de los años 20, difícil de imaginar desde este presente, como el éxito editorial que tuvo Méndez Calzada o, en el caso de González Tuñón, la construcción de un público lector mediante operaciones periodísticas".
Una biblioteca perdida González Tuñón, "el más lírico de los reos porteños", según Last Reason, recopiló en "Tangos" una parte de sus colaboraciones en el diario Crítica, que aparecieron de modo simultáneo con bailes y festivales artísticos de tango y de shimmy, organizados por el periódico de Natalio Botana. Con un lenguaje que amalgama el lunfardo, el cocoliche y la oralidad callejera, "se mueve entre la crónica urbana y el relato inmoral de vidas que fugan de la moral tradicional", observa en su estudio preliminar Guillermo Korn.
"Tinieblas" fue uno de los libros que inauguró la literatura de Boedo, grupo que se enfrentó con el de Florida, en un recordado duelo de tendencias. Hijo de analfabetos, obrero linotipista y escritor autodidacta, Castelnuovo (1893-1982) plasmó en sus cuentos la búsqueda un nuevo realismo, atento a los personajes miserables que en vísperas de la Década Infame asomaban en las grandes ciudades argentinas. "Y Jesús volvió a Buenos Aires" tuvo también un carácter de texto fundador, ya que los relatos breves de Méndez Calzada hicieron visible una incipiente tradición de relatos humorísticos y costumbristas.
"La manga", otra colección de cuentos, fue el primer libro publicado por Scalabrini Ortiz (1898-1959) y su difusión quedó en buena medida postergada por la repercusión de otros textos suyos, como "El hombre que está solo y espera". Para el director de la colección, "Scalabrini fue uno de los mejores escritores del nacionalismo, y tal condición ya está presente en «La manga», donde además sintoniza con dos epítomes de la vanguardia, como Macedonio Fernández en la literatura y Julio De Caro en el tango, lo que lo torna particularmente sensible a las cuestiones de la experimentación estética".
Con tales títulos, "el lector puede encontrar una nueva biblioteca de literatura argentina escondida tras la primera fila de libros", dice Pesce. Los estudios y referencias que acompañan cada edición, además, buscan "mover el piso" de las lecturas establecidas.
Sin nostalgia Víctor Pesce destaca que el rescate de tales autores no surge de la nostalgia. "El pasado no ha brindado todos sus significados todavía, no ha sido redimido -dice-. Hay cosas que están vivas en ese armario y guardan tantas novedades como el futuro". Se trata de reabrir un espacio que puede deparar tantas respuestas como interrogantes: "En el pasado aún reina la intemperie. El pasado nunca deja de inquietar, demanda repetidas revisiones y suscita diferentes interpretaciones o exégesis".
-¿Hay elementos comunes en el olvido de esos textos?
-Claro, están agotados o hay que hacer una suerte de rastreo detectivesco para poder hallarlos en reservorios públicos o privados. Después, no se leen, se los da por sentado, a lo sumo se los describe, están cristalizados por la crítica o son un valioso secreto aún para los ámbitos académicos. En consecuencia queremos darlos a conocer. George Steiner suele argumentar que esta época es bizantina, esto es, supone la glorificación del comentador y el comentario por encima de los textos originales. Nosotros proponemos volver a leer los textos, si fuera posible con una mirada virgen. Sentimos la necesidad, y deseamos compartirla, de extrañar la literatura argentina y leerla como por primera vez. Los textos originales son más útiles que cualquier comentario.
La colección, agrega Pesce, "pretende señalar, desde el punto de vista histórico, que toda canonización a través de las instituciones que regulan los usos de la literatura obtura o, mejor dicho, olvida la diversidad que la sostiene". Más allá de los autores consagrados, entonces, queda mucha literatura por descubrir. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Víctor Pesce: "El pasado guarda tantas novedades como el futuro". | | |