Un empate que sabe a poco

Central Córdoba salió 1 a 1 con All Boys

Los charrúas desperdiciaron la chance de quedar segundo en el Clausura

Gustavo Yarroch / La Capital

Un equipo con aspiraciones de ascenso no se puede permitir las licencias que está dando Central Córdoba. Al igual que en la fecha anterior, cuando apenas empató en su visita a San Telmo, ayer tenía una nueva chance de acercarse a la punta. Pero no. Los charrúas carecieron de la mentalidad ganadora que se necesita para obtener campeonatos y cuando se acordaron de ir con todo en busca del triunfo ya era demasiado tarde. Por eso el 1 a 1 fue tomado con más resignación que conformismo, con menos alegría que preocupación por haber desperdiciado otra oportunidad más que propicia para quedar a tiro de la punta.

Al final, incluso, a Central Córdoba lo terminó salvando De Lemos, quien le tapó un remate de gol a Bittolo y otro a Heber Arriola y se convirtió en la figura de la cancha porque en el primer tiempo también había protagonizado una atajada espectacular. Con la chapa en cero, el Loco alcanzó a manotear con lo justo un tiro desde afuera del área de Mirabet, la pelota dio en la cara interna del palo y salió por poquito.

Pese a todo, parecía que Córdoba se llevaría los tres puntos de Floresta porque a los 14 del segundo tiempo acertó en una pelota parada y All Boys era un manojo de nervios, un equipo que buscaba e intentaba pero chocaba contra su propia ceguera. Por eso, aquella entrada de Silvio Díaz por el segundo palo para mandar al gol el córner de Matías Giménez adquiría mayor valor conforme el paso de los minutos. El propio Giménez pudo haber aumentado en un contragolpe, pero De Nicola se quedó con el mano a mano.

Pero de a poquito, con el empuje de todos y el ímpetu ofensivo que le dio el ingreso de Arriola, All Boys comenzó a merodear con mayor insistencia los alrededores de De Lemos. Un cabezazo bombeado de Arriola dio en el travesaño.

Y cuando quedaban trece para el cierre, los locales elaboraron la mejor jugada del partido y equilibraron el resultado. Barrionuevo y Arriola pergeñaron una doble pared brillante y el primero definió ante la salida de De Lemos.

Córdoba, al cabo, volvió a carecer de frescura para atacar y apostó más de la cuenta a los pelotazos cruzados como fórmula de ataque. No mostró signos de audacia y recién se animó a arriesgar un poquito después de la igualdad de All Boys, cuando tomó verdadera nota de que estaba dejando pasar un nuevo tren. Es cierto que los charrúas son un equipo limitado técnicamente, con más voluntad que luces. Pero hay veces en que se torna imprescindible salir a buscar los partidos con otra decisión. Con más convencimiento. Con eso que el fútbol alguna vez dio en llamar actitud de campeón.

Leandro Armani no pudo marcar ante All Boys.