| miércoles, 04 de febrero de 2004 | Lo admitió la titular provincial de la Dirección del Menor Raquel Sandoz: "Hay chicos delincuentes que no tienen posibilidad de recuperarse" Los niveles de reincidencia llegan a una cifra alarmante: 60 por ciento Laura Vilche / La Capital "Hay chicos delincuentes que prácticamente no tienen posibilidad de recuperarse". Así lo reconoció ayer la titular de la Dirección Provincial del Menor en Conflicto con la Ley Penal, Raquel Sandoz. La funcionaria admitió así la situación que viven muchos de los chicos y chicas de entre 14 y 18 años que delinquen en la provincia. En Rosario son más de 250 los adolescentes atendidos por la Dirección: están en institutos de máxima seguridad, centros de día, con libertad asistida o en comisarías. Han sido protagonistas de robos, "que cada vez efectúan con más violencia", según aseguró Sandoz. Y también han cometido homicidios, un delito que hasta el 2001 representaba el 6 por ciento de las faltas de este grupo etario y hoy trepa al 12 por ciento.
El panorama para estos chicos y jóvenes no es nada alentador si a estas declaraciones se suman las que ya habían hecho la jefa de la Policía provincial, Leyla Perazzo, y dos jueces de menores.
"El 80 por ciento de los robos y homicidios los cometen menores de entre 12 y 16 años", había subrayado Perazzo en la edición de este lunes de La Capital. Y tanto el titular del Juzgado de Menores Nº3, Jorge Cartelle, como el del tribunal Nº2, Leandro Artigas, reconocieron también a este diario que cuentan con una "escasísima" estructura para trabajar estas causas judiciales.
-¿Cuándo toma la Dirección del Menor en Conflicto intervención con los menores que delinquen?
-Cuando los chicos ya han fracasado en el terreno social. O sea nos ocupamos de los jóvenes con causas penales, a quienes el juez les dictó un oficio y nos los pone a disposición para su tratamiento, recuperación y rehabilitación.
-¿O sea que inician su trabajo desde el "fracaso"?
-Y... sí. Cuando la prevención fue insuficiente, cuando todo falló -familia, escuela, comunidad- ahí intervenimos nosotros. Ellos el primer problema lo tienen en su familia, donde en general los padres no trabajan, no contienen y los chicos andan en la calle. Después vemos que entre el 60 y el 70 por ciento de estos menores tiene la escolaridad primaria incompleta. O sea, no se sabe si abandonaron la casa o en la casa se los abandonó, si abandonaron la escuela o la escuela los expulsó.
-Las estadísticas señalan que disminuyó el promedio de las edades de los menores delincuentes. ¿Ustedes observan este fenómeno?
-Sí, estamos trabajando hasta con chicos de 12 años. En la provincia hay unos 420 atravesando distintas etapas de tratamiento, cabe remarcar que la mayoría consumen pegamento, cocaína o anfentaminas con alcohol; la mitad prácticamente es de Rosario y sólo un puñado son mujeres. Con ellos, según lo marcan la legislación internacional, nacional y provincial, el último recurso al que apelamos es a la privación de la libertad. Tenemos en Rosario un instituto cerrado, de máxima seguridad, el Irar (Cullen y Saavedra). En este momento hay allí 36 chicos, con el mayor nivel de deterioro.
-Los que no están en esta situación, ¿dónde están?
-En realidad, una vez que el chico es detenido va a una de las tres comisarías destinadas a menores: la 6ª, la 11ª o la 21ª, allí hay unos 70. Luego toma intervención el juez y, si la causa así lo determina, se hace un diagnóstico y se derivan. Unos 90 viven en sus casas, pero están insertos en un programa de recuperación asistida: son los que más probabilidades tienen de lograr una recuperación. Unos 30 están en el centro de día de Arijón 649, donde realizan capacitación laboral. Otros 25 están en la Comisaría del Menor, de Dorrego al 900. Son los más chiquitos, tienen entre 12 y 15 años. Lo más importante de la recuperación es que tomen conciencia y se hagan responsables de los delitos que cometieron.
-¿Qué posibilidad de reinserción tiene un chico de 14 años con varios robos o un homicidio en su haber?
-Hay chicos que prácticamente no tienen posibilidad de recuperarse. Y encima, hay un 60 por ciento de reincidencia en el delito. A muchos le vemos la cara nuevamente hasta por cuarta vez. Hay que doblegar los esfuerzos en prevención de drogadependencia y en asistencia y tratamiento, o cada vez más chicos serán irrecuperables. enviar nota por e-mail | | Fotos | | "Hay que doblegar los esfuerzos en la prevención". | | |