Botox, o la mágica droga del glamour

La toxina botulínica -más conoci- da por su nombre comercial de Botox - pasó a ser la solución mágica para muchos y muchas que quieren sacarse años del rostro. La denominada "droga del glamour" por Hollywood ya llegó a Rosario con el mismo furor que en el resto del planeta. Una de las ampollas mágicas cuesta unos 250 dólares y opera como un relajante muscular que complementa las cirugías estéticas, o en su defecto las reemplaza. "Es el boom del cambio estético sin pasar por el bisturí", opinan muchos especialistas. En rigor, la inyección de esta sustancia produce una relajación muscular, con unos seis meses de efecto.

"Ya apliqué unas 30 ampollas y anda muy bien para arrugas en la frente y periorbitarias", apuntó uno de los médicos consultados por La Capital.

"El Botox produce una adicción en las mujeres. Con una ampolla se puede aplicar en el entrecejo, muecas del rostro y patas de gallo", explicó otro profesional.

Y un tercer consultado reveló que tanto hombres como mujeres lo utilizan, y que las primeras aplicaciones comenzaron hace una década en Canadá para prácticas oftalmológicas, que luego derivaron en cuestiones estéticas.

El paciente que se lo inyecta puede rehacer su vida normal en sólo cuatro horas.