El gobierno advirtió sobre posibles irregularidades en el escrutinio porteño

Buenos Aires.- El ministro del Interior, Aníbal Fernández, afirmó hoy que, del análisis del proceso de recolección de datos de las elecciones porteñas celebradas el último domingo, surge "una diferencia terrible" en las cargas realizadas en distintos momentos del escrutinio que, de confirmarse, representarían una "gravísima" irregularidad.

"El flujo de la información a mí no me satisface cómo fue presentado", afirmó el ministro al reseñar las razones del pedido de informes cursado al Correo Argentino, para que dé cuenta de los recorridos realizados para el traslado de las actas electorales en el marco del escrutinio provisorio.

Además, el titular de la cartera política advirtió que "si la explicación no es criteriosa" el Ejecutivo acudirá "a la justicia", con lo que anticipó que, de corroborarse algunas sospechas, éstas constituirían una "gravísima" irregularidad"

Ayer, el Ministerio del Interior dio a conocer una carta de Fernández en la que solicitaba a las autoridades del Correo Argentino, a cargo de Franco Macri -padre de Mauricio Macri, quien disputará el 14 el ballottage por la Jefatura de Gobierno- que explique los procedimientos utilizados y la forma en que se realizó la reclección y posterior traslado de las actas.

"Llama mucho la atención cómo se dan los gráficos de entrada de la información", afirmó esta mañana Fernández en declaraciones radiales al explicar las razones de la carta enviada a la conducción del Correo Argentino para que dé explicaciones sobre los procedimientos realizados en el acarreo y entrega de actas.

A raíz de las sospechas del candidato a la Jefatura de Gobierno por Fuerza Porteña, Aníbal Ibarra, y la de los propios responsables del área política y electoral del gobierno, Fernández anticipó que en el ballottage del 14 de setiembre se dispondrán supervisores en el punto concentrador de datos del correo.

"Va a haber supervisores en la próxima elección. Ya está instruido el director Electoral para hablar con los dos partidos y que pongan sus respectivos observadores", afirmó el funcionario en referencia a la presencia ese día de fiscalizadores en las depedencias del Correo Argentino de las avenidas Paseo Colón e Independencia.

En el escrutinio del domingo último, la entrega de datos oficiales por parte del Centro de Cómputos del Ministerio del Interior, a cargo de la empresa española Indra, se demoró tres horas y media la difusión de los primeros datos oficiales, lo que generó el reclamo de los patridos políticos.

"El Estado contrató un servicio y ahora está pidiendo explicaciones" sobre lo actuado, señaló el funcionario al precisar que se pretende clarificar "cómo fue el ritmo en que fueron recibiendo las actas para saber qué pasó".

Las sospechas del gobierno están centradas en la salida discrecional que habrían tenido las actas elaboradas en cada una de las mesas de votación, las que fueron inicialmente concentradas en un edificio del Correo para su posterior traslado al Centro de Cómputos del Ministerio del Interior.

"Mientras estábamas penando para conseguir información para procesar, el propio jefe de campaña de Mauricio Macri salió a hacer un planteo que decía que el Estado era el responsable del manejo de la información", explicó el ministro al dar una de las razones que motivaron al Gobierno al pedido de explicaciones.

En ese sentido, insistió en su interés en "que den la información de quienes fueron los responsables de no proveerle al centro de cómputos los datos para su procesamiento".

"Una cosa es el resultado que no va a variar, los votos que se sacaron son los que están", consideró el ministro al desechar cualquier sospecha sobre fraude, pero alertó sobre la necesidad ineludible de "cumplir con el artículo 105 del Códogio Nacional Electoral que dice cómo tiene que hacerse el procedimiento". (Télam)