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 miércoles, 23 de julio de 2003

Se cree que junto con su padre dirigían la resistencia a las tropas extranjeras
EEUU mató a los hijos de Saddam, que se escondían en el norte de Irak
Uday y Qusay Hussein fueron ubicados en una casa y rodeados por 200 paracaidistas. Festejos en Bagdad

Washington y Bagdad. - Los dos hijos de Saddam Hussein, Uday y Qusay, fueron muertos ayer durante una operación militar en el norte de Irak, según aseguró el ejército de EEUU. Ambos eran buscados desde la caída del régimen de su padre, el 9 de abril pasado, y figuraban junto con Saddam al tope de la baraja de naipes de póker de los hombres más buscados. A cambio de información que permitiera dar con ellos EEUU ofrecía 15 millones de dólares por cada uno. Cuando la noticia se confirmó, se escucharon disparos al aire en Bagdad a modo de celebración.

Para la administración norteamericana en Irak la eliminación los dos Hussein junior es un paso fundamental, ya que presume que junto con su padre comandaban la creciente resistencia armada que enfrentan sus tropas en el país. Pero también es importante la desaparición de los dos hijos del dictador caído porque se considera que los iraquíes no dan más apoyo a la gestión norteamericana por un temor muy arraigado a un eventual regreso de Saddam.

u Saddam se casó dos veces, en 1963 con su prima carnal Sajida Jairalla, con la que tuvo dos hijos (Uday y Qusay) y dos hijas. En 1988 volvió a casarse con una mujer de su clan, Samida Fadel Shahbandar, que le dio otra hija.

u Todo indica que una información anónima permitió a los paracaidistas de la división 101ª de EEUU rodear ayer a la mañana una mansión en la ciudad iraquí de Mosul, en el norte del país. Luego de seis horas de combate, que incluyeron el uso de misiles antitanque, granadas y fuego de ametralladora, los soldados ingresaron a la casa y hallaron cuatro cadáveres. El primer indicio de quiénes se trataba llegó a través de un oficial que comentó a la corresponsal de la CNN en el Pentágono que había "razonable certeza" sobre la identidad de los muertos. Otra fuente agregó que existía "una gran similitud" de rasgos entre dos de los cuerpos y los hijos de Saddam. Otro de los cuerpos pertenecía presumiblemente a un guardaespaldas. El cuarto es de un adolescente, y antes de la confirmación oficial una fuente militar recordó que Qusay tenía un hijo de esa edad.

u El combate de Mosul fue protagonizado por más de 200 paracaidistas de la 101ª división, que rodearon una amplia casa con columnas que resultó parcialmente destruida por el combate. Un líder local de la ciudad que se presentó como el presunto dueño del lugar había confirmado a la agencia France Presse que los que murieron adentro eran Uday y Qusay. "Son ellos. Me vi obligado a darles la casa", comentó. Mosul, en el norte del país, se halla en una zona en la que hay muchos partidarios de Hussein, y apenas terminó el combate se produjo una protesta espontánea contra los soldados norteamericanos.

u La confirmación de la noticia llegó desde Bagdad, de boca de uno de los más altos comandantes militares norteamericanos en el país. El general Ricardo Sánchez convocó a la prensa y ratificó lo que hasta ese momento eran trascendidos extraoficiales. "Estamos seguros de que Uday y Qusay fueron muertos hoy", afirmó Sánchez. Para su identificación se recurrió a varias fuentes, explicó.

u EEUU formó al terminar la guerra una fuerza especial para buscar y capturar o aniquilar a Saddam y a sus dos hijos, las tres figuras máximas del mazo de póquer que hasta ayer no aparecían, en lo que constituía otro fracaso para EEUU junto con la falta de las armas de destrucción masiva del ex dictador. El administrador civil de Irak, Paul Bremer, y el comandante militar, general John Abizaid, habían remarcado especialmente acerca de la necesidad urgente de apresar o eliminar a Saddam y su entorno, ya que los iraquíes temen aún su regreso y esto condiciona su conducta ante los estadounidenses. La eliminación de sus dos hijos es una contribución contundente a quebrar este temor. "Es una fuerte señal a la población iraquí", comentó a CNN un funcionario de la Casa Blanca. A su vez, los recientes mensajes grabados de Saddam galvanizan a la resistencia, formada en parte por ex seguidores de su régimen o "fedayines" de países árabes llegados poco antes de la guerra.

u Ayer, precisamente, murió otro soldado norteamericano, alcanzado por una granada disparada con un lanzacohetes, con lo cual suman 39 los militares caídos desde que Bush anunció el fin de las "operaciones militares mayores" el 1º de mayo pasado.

u Tiroteos esporádicos se dejaron oír en diversos lugares de Bagdad tras conocerse la noticia de que habían muerto los dos hijos de Saddam. "Lo están celebrando. La gente ha oído lo ocurrido", explicó un portavoz militar norteamericano. La mayor parte de los disparos procedía de fusiles Kalashnikov, pero corresponsales de la agencia Reuters también oyeron ráfagas de ametralladoras y pequeñas explosiones. También se pudieron apreciar balas trazadoras en varias direcciones. La celebración entre los iraquíes por la muerte de Qusay y Uday comenzó aún antes de que los militares estadounidenses confirmaran la muerte en Washington.

u El presidente George W. Bush manifestó su beneplácito ante la muerte de los dos hijos de Saddam, "corresponsables del régimen de terror" que sufrió Irak bajo su padre. El administrador estadounidense de Irak, Paul Bremer, dijo por su parte que eran "buenas noticias para el pueblo iraquí", y el ministro de Exterior de Gran Bretaña, Jack Straw, sostuvo que la desaparición de los dos Hussein "traerá tranquilidad" a Irak.

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Los paracaídistas norteamericanos en Mosul.

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