Contra las cuerdas: Los discos como una resistencia

Carolina Taffoni / La Capital

Cuando la crisis explotó en diciembre (¡ya se está por cumplir el primer aniversario!), todo hacía pensar que en el 2002 íbamos a terminar recorriendo bateas de usados, revolviendo entre CDs rayados (sí, rayados) de Tanguito, de Sandra y Celeste, de Gaby, Fofó y Miliki, de cualquier cosa. El año pasado el mercado discográfico ya había recibido más de una trompada por la piratería, y nadie quería imaginar la perspectiva devaluación mediante. El comentario era: "No se va a editar nada". Pero, de a poco, algún anticuerpo habrá surgido, alguna extraña fuerza apareció desde el bajón generalizado. Primero fueron los éxitos aislados de Diego Torres (una bomba que siguió explotando) y Alfredo Casero. Y de golpe resurgió Charly García con "Influencia" (32 mil copias vendidas). Los que apostaron al disco en vivo tuvieron suerte. Los Nocheros ya vendieron 80 mil copias con su recital en el Colón y Bersuit Vergarabat arrasó con "De la cabeza". Los más valientes se largaron con CDs de estudio y nuevas canciones. En medio de una relación tensa con su discográfica, Divididos se jugó por su estilo impenetrable en "Vengo del placard de otro". Catupecu Machu se animó a alterar la tradicional fórmula del power trío con "Cuadros dentro de cuadros". Y Vicentico salió del escudo protector de los Cadillacs con su debut como solista. Otro cruzado es Skay Beilinson, que aprovechó el año sabático de los Redondos para cortarse solo. Los que no están en primera división tampoco se rindieron, y así hasta Turf disfrutó de un hit. En el otro extremo, el pop de la televisión siguió inventando ídolos, y la maquinita de facturar se renovó con Erreway y Mambrú. Eso no es todo. Están por venir un álbum en vivo de Los Piojos, el tercer disco solista de Gustavo Cerati, y los nuevos trabajos de Los Pericos, Dante Spinetta, Luis Salinas y Mimí Maura. Sin embargo, el brindis no sería completo si en Rosario no hubiesen aparecido los nuevos compactos de Coki Debernardi, El Ajenjo, Bulldog, Asphix, La Gringa, Jorge Fandermole y El Regreso del Coelacanto (próximo a editarse). Todos trabajos autogestionados, algunos artesanales, con un amor por el disco-producto, el disco-arte, pocas veces visto. Ningún golpe contra las cuerdas y salud por