Elbio Evangeliste / La Capital
Fue derrota de Central y, como era de esperar, el ánimo no era el mejor en la zona de vestuarios. Muchos hinchas se hicieron presentes en ese sector para expresar su punto de vista. Obviamente el descontento era generalizado y más allá de que algunos querían que el Flaco César Luis Menotti diera un paso al costado (fueron los menos) y otros prefirieron descargar su bronca contra la comisión directiva, todos coincidieron en la gravedad de la situación. El mismo pensamiento que ronda la cabeza de los dirigentes. Y en medio de esta situación el DT, al igual que en los últimos partidos jugados de local, se fue del Gigante sin formular declaraciones. El malestar comenzó a evidenciarse antes de que el equipo abandonara el campo de juego, cuando muchos plateístas se arrimaron a la boca del túnel para insultar a los jugadores y para exigirles que pongan lo que tienen que poner. Así, estaba claro que las demostraciones de precupación proseguirían en la zona de vestuarios. Un minúsculo grupo de hinchas se agolpó debajo del camarín visitante, zona por la que descienden los dirigentes del palco, para insultar a los directivos, signándolos como los principales responsables del mal presente canalla, mientras que otro nutrido grupo esperaba del otro lado, en las inmediaciones del vestuario local. A esa altura se presumía que no iba a haber conferencia de prensa de parte del Flaco Menotti. De hecho así fue. A los pocos minutos de que los encargados de prensa anunciaran que el Flaco no se sentaría frente a los micrófonos, el DT canalla bajó -fue el primero- del camarín y emprendió la retirada. Como era de esperar, el intento de los periodistas que estaban montando guardia por lograr la palabra del entrenador fue estéril. El Flaco en ningún momento detuvo su marcha y el "muchachos no voy a hablar" fue lo único que salió de su boca, mientras trataba de hacerse paso como podía. Y en el medio de su recorrido hasta el playón de estacionamiento estaban los otros hinchas -menos de un centenar-, los que la pedían al técnico que se quedara. Porque si bien hubo quienes exigían lo contrario y hasta centralizaron su crítica en hechos puntuales, como el de no haber hecho ingresar al Mellizo Gustavo Barros Schelotto, la gran mayoría le mostró su apoyo. Con "el Flaco no se va" de fondo, Menotti se retiró del Gigante de Arroyito. Pero está claro que las próximas horas serán decisivas y que hoy esos mismos hinchas, luego de una reunión que mantendrá el propio técnico con los dirigentes en Buenos Aires, podrían llegar a ver que su apoyo fue en vano.
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