Año CXXXV
 Nº 49.641
Rosario,
jueves  24 de
octubre de 2002
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Reutemann retó a Bondesío por criticar a Parola

"Hay chispazos". Con esta frase el gobernador Carlos Reutemann se refirió a su relación con el ministro de Salud provincial, Fernando Bondesío, luego de que se conocieran críticas del funcionario sobre su antecesor, Carlos Parola.
Bondesío había sido llamado de urgencia el martes a la Casa Gris, donde habría sido advertido por las críticas a su antecesor ("Encontré que en el Ministerio se había puesto el carro delante del caballo", fue una de las frases con las que se había referido a Parola) que no cayeron bien en los despachos del palacio gubernamental.
Ayer al cabo de un acto, los periodistas le preguntaron -varias veces- al gobernador si estaba conforme con la gestión de su nuevo ministro. El mandatario optó por un elocuente silencio. En cambio cuando se le inquirió sobre la actitud que éste había tenido fue tajante: "Hay chispazos", dijo y con tono enojoso aseguró que "ustedes saben que a mí no me gustan las declaraciones rimbombantes". Incluso, asintió cuando se lo consultó sobre si le tiraría de las orejas.
"Lo único que he tenido son palabras de elogio con Parola", recordó el gobernador al valorar el esfuerzo que le significó al ex funcionario la función pública sin venir de la política.
La polémica comenzó el martes en un acto en Santa Fe del movimiento social Los Sin Techo en el que se lanzó un programa de asistencia para menores y al que asistió Parola en calidad de invitado. El líder de la organización, el sacerdote Atilio Rosso, fue el encargado de presentarlo: "Parola para mí era sentir una mano que me acompañaba en la comprensión del problema de ustedes".

Sorpresas
Fue la primera aparición pública del ex ministro luego de que abandonara su cargo. Y ante un auditorio colmado dijo: "Me siento en una etapa donde sorpresivamente no recibo más que agravios por parte de algunos funcionarios. No voy a contestar absolutamente nada -advirtió-, sólo voy a decir una sola cosa. Durante mi gestión, que fueron casi tres años, no hubo ni carros ni caballos. Lo que estaba adelante del espíritu de quien fue el ministro era la gente y por eso trabajé y por eso voy a seguir trabajando toda mi vida".
Luego, ante la prensa volvería a referirse a Bondesío al sostener: "No conozco demasiado cuáles son los antecedentes en salud del actual ministro".
El padre Rosso también mencionó a Bondesío. "Al nuevo ministro no lo conozco. Lo único que sé es que anda preocupado por los números y a mí me interesan más las madres, los chicos. El ministro que siga con los números, poniéndole nuevas cerraduras a las puertas, todo eso me parece sumamente interesante pero guarda que después no nos encierre adentro de las piezas", advirtió el sacerdote.
Pero el tirón del orejas en la Casa Gris produjo efecto inmediato, ese mismo martes. Fernando Bondesío apareció esforzándose por apaciguar los ánimos. Negó una confrontación con Parola respecto de quien dijo que "vivió otro momento del país que se le vino encima. Fue víctima de una situación. Son dos realidades distintas. Abrir un juicio de valor es incorrecto, hay que reconocer escenarios diferentes. Esta crisis se llevó a Parola y a varios funcionarios valiosos", se lamentó.


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