Santa Fe.- Cinco integrantes de la policía provincial fueron detenidos por orden judicial en las últimas 48 horas, dos de ellos por tentativa de extorsión y privación ilegítima de la libertad, otro por integrar una peligrosa banda de asaltantes y otros dos por presunto abandono de persona seguido de muerte (ver aparte).
Esta serie de detenciones resulta inusual de acuerdo a las estadísticas de la policía santafesina, ya que se trata de tres hechos delictivos distintos que no guardan ninguna relación entre sí.
En uno de los casos, el suboficial César Luis Tobar fue detenido en la localidad de Santa Rosa de Calchines junto a cuatro delincuentes que planeaban concretar un asalto a una finca rural.
La división Seguridad Personal de la Unidad Regional I detuvo a Tobar, quien presta servicios en la comisaría 7ª de la capital provincial, al ex policía de Entre Ríos Miguel Avila, a Gabriel Acuña, Alberto Flores y Humberto Vallejos. En poder de la banda, los pesquisas hallaron tres armas de fuego y siete pasamontañas, dijeron los voceros.
Según trascendió, Seguridad Personal seguía los pasos de la banda y mediante tareas de inteligencia determinó que se aprestaba a concretar un asalto a un habitante de Santa Rosa de Calchines, en cercanías a la capital santafesina.
Los detenidos se desplazaban a bordo de un automóvil Fiat Siena color azul y tenían en su poder un revólver calibre 22 largo, un revólver 32 largo y una pistola 9 milímetros, además de los siete pasamontañas con los que supuestamente pensaban cubrir sus rostros para perpetrar el golpe.
Los voceros indicaron que algunos de los integrantes de la banda tienen antecedentes penales y confirmaron que Acuña gozaba de libertad condicional luego de haber estado en prisión por robos calificados.
Una historia repetida
En otro de los episodios que tiñen el accionar de la policía santafesina, un subcomisario y un suboficial mayor fueron detenidos e incomunicados imputados por los presuntos delitos de tentativa de extorsión y privación ilegítima de la libertad en perjuicio de un detenido, informaron fuentes judiciales.
Los voceros indicaron que ambos policías habrían solicitado dinero a la familia de un preso como condición para no mantenerlo detenido, en un hecho investigado por la División de Asuntos Internos y luego derivado al Juzgado de Instrucción número 8 de esta ciudad.
Las fuentes identificaron a los policías detenidos como el subcomisario Juan Manuel Rodríguez y el suboficial mayor Oscar Ismael Julio, quienes cumplían funciones en la subcomisaría 3ª de la capital santafesina, ubicada en barrio Las Flores II.
Además de los detenidos, la Justicia investiga al tercio de la guardia presente en la seccional, compuesta por otros seis policías que habrían conocido la situación pero omitieron intervenir.
Los policías presos le habrían dicho a los familiares de un detenido por hurto calificado que si no entregaban una cantidad de dinero, que sería de 200 pesos según fuentes del caso, el detenido seguiría en la seccional más allá de los plazos legales.
El juez Roberto Prieu Mántaras incluyó la figura de privación ilegítima de la libertad porque el detenido debía ser liberado a las 14 del martes, pero permaneció en la seccional siete horas más.
Vale recordar que en la misma comisaría donde fueron apresados Rodríguez y Julio, en marzo pasado cayeron detenidos otros cuatro policías por incumplimiento de los deberes de funcionario público y por ser partícipes de una tentativa de extorsión.
Entonces, los 31 efectivos que prestaban servicios en la seccional fueron relevados de sus cargos y siete de ellos arrestados luego de que un hombre denunciara que había sido extorsionado por un preso. Dos semanas después, el juez Rubén Saurín procesó a los agentes Carlos Roa, José Mendicino, Victoria Balcalá, Osvaldo Gorosito y Adrián Vázquez, y al detenido Héctor Budiño que, según la investigación, se movía libremente dentro de la comisaría y atendía a las personas que llegaban a efectuar denuncias.
La Ciudad
