Cuarto día de protesta en la cárcel de Rosario

Los 64 internos del pabellón A de la Unidad de Detención Nº3 de Rosario, dependiente del Servicio Penitenciario, continuaban ayer una huelga de hambre en reclamo de la aceleración de sus causas. La medida comenzó el lunes pasado con otros puntos, como lograr la autorización de recibir visitas íntimas para los detenidos de baja conducta. La mayoría fueron acordados con las autoridades del penal, con excepción del pedido de aumento de calificación para los internos con mala conducta, a lo que se negó el director del Servicio Penitenciario.
Uno aspecto importante de la protesta es la aceleración de las causas de los detenidos, ya que algunos llevan tiempo a la espera de sus sentencias o la resolución de las apelaciones.
A partir de esa cuestión, la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC) presentará hoy un escrito ante la Defensoría General de Cámaras de Tribunales y el Colegio de Abogados. El reclamo pretende que ambos órganos pongan en conocimiento de los defensores la medida que llevan adelante los internos y agilicen los trámites en los juzgados correspondientes a fin de brindar una respuesta a los detenidos, explicó Antonio Tesolini, de la CTC.
Sobre el aumento en las calificaciones Gandolla explicó que el pedido de los internos - recibir un aumento para quienes tienen los conceptos más bajos- le parece "injusto en relación al esfuerzo que realizan los otros detenidos para lograr la calificación".
Gandolla señaló que el régimen de visitas íntimas ya fue considerado por la dirección, que elevó modificaciones a Gobierno "para que Santa Fe tenga las mismas condiciones que otros puntos del país". En el transcurso de la protesta los internos lograron atenuar la sanción de un interno y acelerar los trámites de dos detenidos que se encuentran en condiciones de lograr la libertad condicional.