Israel comenzó ayer a construir un nuevo asentamiento en Jerusalén oriental, ocupada desde la guerra de 1967. Para ello fue cercado un terreno de más de diez hectáreas junto a la zona árabe de Yebel Mukaber, donde está previsto construir varios cientos de apartamentos, un hotel de lujo y un funicular. El constructor, el ex comandante de policía de la ciudad Arieh Amit, obtuvo todos los permisos necesarios de las autoridades de la ciudad para levantar el asentamiento Nof Sahaw (Vista Dorada). Una empresa de seguridad y miembros de la policía de fronteras protegían ayer el lugar de posibles protestas. Los palestinos reclaman sin embargo que parte del terreno les pertenece y que la ciudad les negó en el pasado permisos de construcción alegando que se trataba de una zona destinada a parques en la que no se podía edificar. (DPA)
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La Ciudad
