El presidente Fernando de la Rúa y el gobernador de Buenos Aires, Carlos Ruckauf, se trenzaron ayer en una nueva polémica, que incluyó un pedido del jefe del Estado para que el bonaerense "reduzca los gastos en publicidad y propaganda" y una queja como respuesta del mandatario provincial, quien dijo que el jefe del Estado lo "agrede" después de "todos los esfuerzos" que ha "hecho por ayudarlo".
Por la mañana, apenas llegó al aeropuerto de Ezeiza proveniente de Europa, De la Rúa contestó a las críticas del gobernador bonaerense y le aconsejó "reducir los gastos de publicidad y propaganda" de su administración, los que consideró "llevan a un tremendo déficit".
"Es lamentable que el presidente mienta o ignore temas tan elementales como el presupuesto de las provincias argentinas", respondió a su vez Ruckauf.
Así se tensó más el cruce verbal entre ambos, que había comenzado con una réplica de Ruckauf a una polémica frase del presidente en Portugal, donde había afirmado que en Argentina "sólo falta un click para que los argentinos vuelvan a consumir, (para) que la economía se ponga en marcha, para crecer y salir de la recesión".
El gobernador tomó la figura ideada por el presidente y retrucó que el jefe del Estado pretendía "un click porque su gobierno provocó un crac".
La reacción de Ruckauf, que paralelamente había reclamado al peronismo que se "preparara para tomar el poder (en el 2003)", evaporó entre ambos el clima de distención alcanzado después del acuerdo de los gobernadores y la Nación.
En su respuesta, De la Rúa intentó cambiar el eje del debate, que hasta entonces había girado alrededor de la política económica del gobierno y enfocar hacia los gastos publicitarios de la provincia de Buenos Aires. El bonaerense rechazó las acusaciones y dijo "lamentar mucho" que el jefe del Estado "vuelva a agredirme".
Como defensa, el bonaerense afirmó que su gasto en publicidad "es sólo el 20 por ciento del de la Nación" y se quejó porque "todos los gobernadores tenemos dificultades para pagarle a los empleados públicos y jubilados de nuestras provincias porque el señor presidente retiene indebidamente fondos que son de las provincias".
De todas formas, Ruckauf evitó dar por cortado el diálogo con el presidente y aseguró que, junto con el resto de los mandatarios, volvería a reunirse con De la Rúa "cuando él nos convoque".
Por último, el gobernador de Buenos Aires evitó garantizar la aprobación del Presupuesto 2001 en el Congreso, que a partir de diciembre estará en manos del justicialismo, al advertir que "todavía no se conoce" su contenido y que, por lo tanto, "habrá que esperar que el gobierno lo remita" al Congreso.
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La Ciudad
