Alvaro Torriglia
Jorge Remes Lenicov es una de las cabezas pensantes del entorno del senador justicialista electo Eduardo Duhalde, cuyo nombre se barajó en las últimas elecciones presidenciales para ocupar el Ministerio de Economía. Hoy forma parte de la bancada justicialista en la Cámara de Diputados de la Nación y sigue siendo un referente partidario en temas económicos. Sobre el cierre del Coloquio de Idea que sesionó la semana pasada en Mar del Plata, Remes Lenicov se mostró proclive en diálogo con La Capital a llegar a un arreglo en las prolongadas negociaciones entre Nación y provincias por la coparticipación nacional, pero pidió más "flexibilización" a la Nación. Además, negó que exista una jugada de partido para anticipar un recambio del gobierno.
-¿Los gobernadores tienen que firmar el acuerdo con la Nación?
-Creo que en algún momento hay que arreglar la situación entre Nación y provincias, pero el gobierno nacional debería tener algún grado de flexibilización. Lo que piden los gobernadores no es un absurdo. El gobierno pretende reducir un 13% los fondos para lo que queda del año y el año próximo. Y los gobernadores firmaron en el 99 y el 2000 a disgusto un compromiso que se armó pensando que el gobierno nacional iba a recaudar más y que se iba a quedar con la diferencia. En segundo lugar, cuando se firmó el equilibrio fiscal se dijo que deducidos el pago de los intereses de la deuda y la coparticipación, el resto se ajustaba. A partir de ahí, el gobierno nacional violó la ley y el acuerdo. Entonces los gobernadores aceptan una reducción para el año próximo, pero dicen: que nos paguen con plata. ¿Por qué los empleados de las provincias cobrarán Lecop y los de la Nación no?
-La nueva propuesta de los gobernadores, que incluye coparticipar todos los impuestos, ¿no significa alejarse más del acuerdo?
-Es una propuesta, no un tema cerrado. La idea es que si la Nación no garantiza piso y techo se vuelva al origen y coparticipe todo. El impuesto al cheque salió con el entendimiento de que el gobierno nacional iba a pagar la suma fija de coparticipación.
-¿Cuál es la llave para destrabar el acuerdo?
-La primera condición es la voluntad. La segunda es enhebrar una agenda de cinco, seis o siete puntos para discutir el mediano plazo. Pero me parece que debe llamar el que mayor poder y responsabilidad tiene, la Nación. Pero estoy absolutamente convencido de que hay que llegar a un acuerdo.
-De la Rúa se entrevista con Bush sin acuerdo.
- La situación de Argentina es crítica, exige medidas audaces pero requiere del acuerdo de todos los sectores. El gobierno nacional tiene que empezar con un cambio de rumbo. Hace dos años que estamos en recesión y ahora en depresión, ¿cuál es el día siguiente? Si el paquete de medidas no es asumido por la sociedad las medidas se diluyen, más allá que en el paquete anunciado el gobierno se arroga poderes que no tiene.
-¿Cómo poner el impuesto al cheque como garantía?
-Más que eso la delegación de facultades y los decretos de necesidad y urgencia. A al larga el gobierno va a tener que cambiar. Espero que lo haga porque si no el diálogo se va a hacer cada vez más difícil.
-¿Cómo juega la interna del PJ en esta falta de acuerdo?
-Siempre hay especulaciones individuales, pero la situación es tal que en este momento no creo que estén jugando. Lo cual no quiere decir que cada uno piense en cómo posicionarse para el 2003.
-Con la disputa por la presidencia del Senado, ¿se está gestando un clima de salida anticipada del gobierno?
-No, esa no es la idea. La idea es que si a nosotros en diciembre del 99 la gente nos votó para hacer oposición, ahora nos votó para asumir mayores responsabilidades. Si tenemos mayoría en Diputados, por qué no tener la presidencia. Si la tenemos en el Senado, por qué no presidirlo. A mí particularmente no me gusta porque creo que la sucesión tiene que ser del mismo partido gobernante. Pero estas cosas vienen porque hace unos días el gobierno nacional sacó un par de decretos que rayan el ordenamiento institucional, que es algo que hay que mantener a rajatabla.
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La Ciudad
