cartas

Nos siguen tomando de tontos

El día martes de la semana pasada los rosarinos nos despertamos con la noticia de que el intendente Hermes Binner realizaría una magna reducción de gastos en el funcionamiento de la Municipalidad. A priori como contribuyente entendí que la clase política de la ciudad estaba comprendiendo el sacrificio que estamos realizando por pagar a término nuestros deberes como ciudadanos aquellos que trabajamos en el sector privado. Luego, analizando en detalle las medidas publicadas, la decepción me fue invadiendo, era tan sólo el 1% del presupuesto anual que tiene la Municipalidad de Rosario ( es decir 3.000.000 de pesos aproximadamente, según fuentes oficiales). Días después su secretario de Hacienda manifestaba que el recorte no alteraría en absoluto el funcionamiento normal de los servicios que presta la Municipalidad a sus contribuyentes, y la duda me terminaba de dominar, ya que me preguntaba por qué durante todos estos años no se racionalizó el gasto manteniendo la calidad del servicio y se comenzaba a dar una señal de austeridad y de alivio para aquellos contribuyentes que queremos seguir viviendo en una ciudad solidaria.
Luis Ernesto Gómez