Lograr que la gente vuelva a interesarse en la política, generar ámbitos de mayor participación ciudadana y solucionar de una vez por todas el alicaído sistema de transporte de la ciudad. Estas son algunas de las metas que los nuevos concejales que asumirán el próximo 10 de diciembre ya tienen agendadas. A menos de un mes de que ocupen sus bancas, La Capital dialogó con la mayoría de ellos y pudo conocer cuáles serán sus primeros proyectos. Algo es seguro. El descontento que la gente mostró en las últimas elecciones deberá generar un cambio de actitud en los legisladores, y muchos ya tomaron nota. Se prevén auditorías permanentes de las funciones de gobierno, publicaciones en Internet de cantidades de empleados municipales con sus correspondientes sueldos y hasta se vienen sesiones en los barrios "para que la gente tenga un contacto más cercano".
El problema del transporte no estará ausente. No son pocos los que ya analizan distintas ideas para mejorar el sistema. El electo concejal justicialista Alberto Joaquín aseguró ayer que su primer proyecto será "impulsar un nuevo llamado a licitación del transporte urbano de pasajeros". Su iniciativa prevé un sistema administrado por dos empresas "con 300 colectivos cada una". También habla de servicios diferenciales con un boleto de mayor valor. En cuanto a este tema, Joaquín estimó que el pasaje común "deberá costar 65 centavos".
Otro de los que también le apuntará al transporte será el peronista José Elmir. "Vamos a impulsar una reforma integral del sistema, porque ese tema necesita una rápida solución", adelantó. En ese orden, consideró que el actual servicio "está muy deteriorado y los usuarios siguen sufriendo las consecuencias". Su proyecto, hoy en etapa de estudio, será presentado en sociedad "antes de fin de año".
Por la "participación popular"
Para el justicialista José Bonacci será fundamental cambiar la "desacreditada imagen del Concejo". Con el objeto de lograrlo, impulsará auditorías permanentes de las funciones del Palacio Vasallo. "La gente tiene que saber cuántos proyectos presenta cada concejal y si va a trabajar o no", opinó. Además, propondrá la creación de una comisión que sesione en los barrios. "Allí pondremos a trabajar a muchos de los 208 empleados que hoy se pasean en el Concejo. Como decía el general: "La mejor manera de mantener a la tropa funcionando es haciéndola combatir", recordó.
Por su parte, la socialista Mónica Fein adelantó que su primer proyecto será la creación del Programa de Salud Integral de la Mujer. "Se fomentará la consulta periódica al médico, el acceso de todas las mujeres a los distintos métodos anticonceptivos y la detección de HIV en embarazadas", explicó.
Norberto Nicotra, en tanto, intentará crear un organismo de control municipal sobre las actividades del puente Rosario-Victoria. "Importantes rutas del norte del país van a recaer en el puente y allí tenemos que estar atentos a los caminos de la droga, la llegada de gente indocumentada y el contrabando. Rosario tiene que participar de los distintos controles que realice la policía o la prefectura", indicó.
Otro justicialista, Oscar Larrauri, impulsará la creación del Estatuto del Ciudadano. "Durante la campaña me di cuenta de que nadie sabe muy bien cuáles son sus derechos y los deberes del Municipio para con los rosarinos", señaló. El estatuto contendrá, entre otros aspectos, una detallada lista de los derechos de los ciudadanos, entre los que figuran el de "obtener información sobre las actividades de la Administración Pública Municipal".
Este mismo punto también impulsará, desde el ARI, Gustavo Gerosa. "Queremos que el Concejo y la Municipalidad publiquen todos sus actos en Internet. Así sabremos cuánta gente trabaja, cuánto gana, cuánto se invierte en obras. Lo que se busca es transparencia", subrayó.
El radical Omar Paredes, en tanto, adelantó que ya presentó un proyecto tendiente a "reactivar el turismo en la ciudad. Hay que reformular el Etur y crear allí cargos rentados para profesionalizar las funciones", opinó.
Por su parte, Sandra Cabrera (que llegó al Concejo por el sublema conocido popularmente como "ARI trucho") promocionará la creación de microemprendimientos familiares. "Esto permitirá la reinserción laboral de aquellas personas que han quedado marginadas de la actividad", señaló.
La Ciudad
