Una pasión que supera fronteras

Tras la aplaudida performance de José Cura y Eduardo Delgado en el Auditorio Fundación Astengo la celebración del 25º aniversario del Mozarteum continuó con una cena servida en el hotel de Santa Fe al 1500. Allí, presididos por una mesa que reunió a Jaime Abut, actual presidente del Mozarteum, al intendente Miguel Lifchitz, y a José Cura y Eduardo Delgado, más de doscientos comensales brindaron por el acontecimiento. Más allá de los habitué de los conciertos del Mozarteum, concentraron la atención general las presencias de Chikako Fukasawa, quien voló desde Tokyo para ver a José Cura y sus amigas Megumi Muto, que llegó desde Nueva York con el mismo objetivo y Silva Yajima, otra simpática japonesa que completó el terceto de viajeras. Otros asistentes notables fueron una fan llegada desde Berlín, Alemania, y una admiradora de Eduardo Delgado que viajó desde los Estados Unidos para no perderse el concierto. Otros admiradores de Cura y Delgado se trasladaron desde la lejana Comodoro Rivadavia y también lo hizo la cineasta Lucía Puenzo, desde Buenos Aires.