Campanadas interminables

"Ama a tu prójimo como a ti mismo", eso es algo que decía Jesús y parece que al padre Longi de la iglesia San Cayetano se le ha olvidado. Poder descansar un domingo, ya que trabajo de lunes a sábados y vivir cerca de su iglesia es más que una misión imposible. Desde las siete y treinta en adelante aguantar sus "desmedidas llamadas a misa", con más de diez minutos de campanadas en cada llamada, es algo insoportable. Que yo sepa _y que alguien me corrija si no estoy en lo cierto_ las llamadas a misa no pasan de tres o cuatro campanadas por vez y nunca diez minutos. Pero parece que al padre no le importa que la gente descanse el día que Jesús hizo para eso, y ni me quiero imaginar las personas que no profesan la religión Católica cómo se sentirá. Ojalá alguien le diga que con sus actitudes en misa y sumándole las molestias que le ocasiona a los vecinos con sus manías lo único que hace es alejar a la gente de la casa del señor. Que Dios y Jesús le abran la mente un poco a este padre y vea que molestar a la gente en su único día de descanso no es para nada católico. "Dios es amor y nos quiere a nosotros como hijos", ¿recordará eso el padre?

Hernán Darío D'Antonio

DNI 22.679.618