Tras agonizar nueve días murió sargento baleado

El sargento Marcelo Armando Montenegro, quien fue baleado el pasado miércoles 21 por un par de maleantes en una presunta venganza, falleció la tarde de ayer tras agonizar nueve días en un sanatorio céntrico. Por el hecho hay dos hombres detenidos cuya situación procesal se complicó con este desenlace ya que la acusación de lesiones gravísimas se convirtió en homicidio.

El trágico ataque al policía ocurrió en Alvear al 1300, en el barrio Talleres de Villa Gobernador Gálvez. Montenegro, de 39 años, llegaba a su casa junto a su esposa y uno de sus cinco hijos tras realizar compras en un supermercado. Iba en su moto y vestido de civil ya que estaba gozando de vacaciones. Apenas arribó, alrededor de las 17.30 de aquel día, su mujer y el pequeño ingresaron a la casa mientras que él se demoró para entrar el rodado. Pero no le dieron tiempo.


Desde atrás
Dos hombres que aparentemente lo habría llamado por su nombre lo atacaron a balazos por la espalda Dos balazos impactaron en la cabeza del oficial que cayó malherido en el pavimento Al escuchar las detonaciones la esposa de Montenegro regresó a la vereda y vio a su marido exánime

Un rato después, un patrullero trasladó al policía baleado al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, desde donde más tarde fue derivado al Sanatorio Británico. Allí, Montenegro estuvo hasta ayer internado en la sala de terapia intensiva, conectado a un respirador artificial y con diagnóstico de muerte cerebral.


Hipótesis
En un primer momento los partes policiales dijeron que al oficial lo agarraron de atrás para robarle la moto El quedó inmovilizado y los tipos le tiraron sin que pudiera resistirse En ese orden testigos e investigadores afirmaron que el asaltante efectuó siete disparos

"Estaba de espaldas y lo llamaron por el nombre, porque son conocidos. No le dieron tiempo a nada. Mi hermano vivió toda la vida en Gálvez", agregó Pedro Montenegro.

Incluso, una vecina que vio todo lo ocurrido declaró ante la jueza de Instrucción María Luisa Pérez Vara y confirmó que el ataque poco tuvo que ver con un robo. "La mujer dijo que escuchó siete estampidos, como de cohetes, y que le dispararon a mansalva después de llamarlo por su nombre", sostuvo un vocero tribunalicio.


Detenidos
En tanto pocas horas después de la agresión dos hombres fueron apresados en la villa que se ubica detrás del frigorífico Swift Cristian Imperiale de 31 años e Iván Ríos de 24 quedaron acusados de balear al sargento Cayeron cuando intentaban robar un ciclomotor Garelli a trece cuadras del lugar donde habían herido a Montenegro Al verse cercados los maleantes se desprendieron de un revólver calibre 22 que fue secuestrado por la policía El arma tenía en su tambor siete vainas servidas