Piden justicia por crimen en boliche

“Exigimos que no sigan matando a los jóvenes”. La frase de Lilian Saavedra, integrante de las Madres de la Lucha y el Dolor, sintetiza el clamor de quienes ayer participaron de la marcha en reclamo de justicia por el crimen de Ezequiel Arce, el chico de 17 años que la madrugada del 17 de marzo murió tras ser golpeado por patovicas del boliche Mogambo.

  Ayer a las 19 familiares y amigos de Ezequiel marcharon hasta la disco de Avellaneda y Gálvez donde, en medio de un conmovedor silencio, sostuvieron pancartas que rezaban “Justicia, no palabras” y carteles con la foto del pibe asesinado.

  Una mujer rubia con el rostro marcado por el dolor encabezaba el acto. Era Amelia Ojeda, la madre de Ezequiel. Su reclamo fue vehemente: “Queremos que Mogambo no abra nunca más. Que no haya más muertes y que condenen a perpetua a los que mataron a mi hijo”.



Acompañados. El tono de la madre de Sebastián Bordón —asesinado por policías en Mendoza— e integrante de las Madres de la Lucha y el Dolor, fue también apasionado. “Venimos a acompañar a la familia de Ezequiel, que fue a divertirse y terminó torturado, esposado y asesinado por patovicas. Ahora hay que poner los ojos y los oídos en la Justicia, en el poder político y vamos a hacer lo imposible para que este lugar no vuelva a abrir y para que sean condenados los responsables de este asesinato”, afirmó. l