|
domingo,
25 de
marzo de
2007 |
Viajeros del Tiempo
Rosario 1905/1910
Guillermo Zinni / La Capital
Explosión de una locomotora. Nuestro corresponsal de Empalme Villa Constitución nos da cuenta de una dolorosa catástrofe ocurrida ayer a la madrugada. Era la 1.30 de la mañana cuando una terrible explosión alarmó a este vecindario. Algunos pensaron que se trataba de un temblor de tierra, y otros que había explotado alguna mina, pero nadie sabía a qué atenerse. Todo el mundo salió a la calle para enterarse de lo ocurrido y grande fue la sorpresa al darse cuenta de que había explotado la caldera de una locomotora del ferrocarril. Cuando la máquina se encontraba a unas quince cuadras de ese pueblo, se saltó de los rieles, después de lo cual explotó en pequeños trozos que se elevaron por el espacio y que fueron a caer a grandes distancias, destrozando cinco cuadras de alambrado y postes telegráficos, los que fueron partidos por el medio. El cuadro de desolación fue enorme y los vecinos se aglomeraron alrededor del siniestro. Fallecieron en el hecho los ocupantes de esa locomotora: el maquinista Brown, inglés; el foguista Rodríguez, español, el guarda Altamira, argentino, y un tal Busso, italiano; los cuatro tenían mujer e hijos. El accidente dejó a sus cuerpos horriblemente mutilados: a los dos últimos les faltan las piernas, que todavía no fueron encontradas, y de los otros, uno tiene enterrado en el rostro un pedazo de hierro de la caldera que se lo cortó de arriba a abajo y el segundo tiene incrustados varios trozos de metal en el cuello. Las mutilaciones son de tal suerte impresionantes que por todas partes se oyen las exclamaciones de horror de los vecinos. Se dice que el maquinista y el foguista iban algo ebrios.
[email protected]
enviar nota por e-mail
|
|
|