Suma interesados el registro de actos de autoprotección

A poco de ser implementado, el registro de actos de autoprotección, creado por el Colegio de Escribanos de Rosario, sigue sumando interesados. Se trata de una nueva herramienta jurídica para que aquellos ciudadanos que lo deseen puedan dejar constancia de su voluntad con respecto a su persona o a sus bienes, en caso de que en algún momento se encuentren imposibilitados para decidirlo por sus propios medios.

Esa imposibilidad podría surgir por alguna enfermedad o por una indisposición temporaria. En definitiva, se trata del derecho de cada individuo al más íntimo ejercicio de la libertad en cuanto a disponer cómo desea vivir su propia vida.

La secretaria del Colegio de Escribanos, Alicia Rajmil, destacó que las escrituras inscriptas fueron otorgadas mayoritariamente por mujeres, con edades que van de los 45 años hasta los 90. Dejaron en claro sobre todo cómo quieren que transcurra la última etapa de sus vidas, por quiénes desean ser cuidados y en qué ámbito edilicio.

El registro funciona en el archivo de protocolos del Colegio de Escribanos, y la persona que lo desee deberá asesorarse con un escribano, y una vez que lo resuelva, deberá dejar plasmada su voluntad en una escritura pública ante el mismo profesional.

Todas las personas mayores de edad están habilitadas para realizar este trámite, que tiene un costo equivalente al de un testamento.

El Colegio de Escribanos de Rosario es el segundo en el país que ha implementado este registro. El primero en hacerlo fue su similar de Buenos Aires.

Rajmil explicó que "los actos de autoprotección tienen que ver con la idea de que una persona es sujeto de derecho desde el inicio de su vida hasta la muerte. Y aunque no pueda autogobernarse, si su voluntad se ha expresado oportunamente en forma clara e indubitable, debe ser tenida en cuenta".