Se desmovilizó en Colombia el más veterano jefe paramilitar

Con él se entregaron 754 hombres, sumando más de 22 mil los ultraderechistas que han dejado las armas

Bogotá. - El más viejo de los jefes de los paramilitares, Ramón Isaza, quien llevaba 28 años en guerra, entregó sus armas junto a un millar de combatientes ante miembros del gobierno y de la Organización de Estados Americanos, OEA, en el norte de Colombia. El episodio forma parte de la política de desarme del gobierno colombiano, que ha tenido éxito con los ultraderechistas paramilitares, pero no aún con las guerrillas de izquierda.

"Entregamos las armas y sólo me basta pedirles a cada uno de ustedes que no las volvamos a tomar", dijo Isaza, de 65 años, en la ceremonia en el área rural de Puerto Triunfo, a 220 kilómetros al norte de Bogotá.

Con Isaza renunciaron a la lucha 990 paramilitares, que entregaron 754 armas, entre fusiles, pistolas, escopetas, lanzagranadas. Comúnmente, en las desmovilizaciones de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), el número de armas es menor al de combatientes.

Con esta vigésima octava desmovilización de paramilitares, ya son más de 22.000 los combatientes de estos grupos que han entregado las armas bajo el programa impulsado por el gobierno.

Mauricio Romero, autor del estudio "Paramilitares y autodefensas 1982-2003", declaró que "el caso de Ramón Isaza es muy significativo porque él es de la primera generación de grupos paramilitares". Este grupo, que desterró de su área de influencia a la guerrilla que extorsionaba a ganaderos, narcotraficantes y campesinos en los 80, estuvo muy ligado con altos mandos militares, expuso el analista.

El grupo fundado por el ahora sexagenario líder junto a otros ocho compañeros, ya muertos, está acusado de participar activamente en el exterminio del partido de izquierda Unión Patriótica y en el magnicidio de políticos, incluidos tres candidatos presidenciales, añadió Romero. En la larga guerra colombiana, el Magdalena Medio, como se conoce esta región, era un fortín electoral del Partido Comunista.

El martes, el diario El Tiempo, el principal del país, afirmó que era mejor ver a Isaza entregando su ejército que asesinando, pero que ahora el reto es "desparamilitarizar regiones enteras permeadas por la mezcla de contrainsurgencia brutal, narcotráfico y puro crimen que han sido las AUC. Si ese es el precio de poner fin al nefasto fenómeno del paramilitarismo en Colombia, vale pagarlo. La cuestión es que la desmovilización sigue despertando grandes dudas en torno a dónde terminará conduciendo", afirmó el editorial.

El alto comisionado para la paz, Luis Carlos Restrepo, dirigiéndose a los pobladores de la zona les pidió paciencia. "No alberguen temores, no quiere decir eso que no va a haber dificultades, hay que mantener la calma y hay que mantener la fortaleza", dijo Restrepo, en referencia a miedos expresados por los pobladores que la guerrilla vuelva a esa zona. En el otro bando de la guerra, Manuel Marulanda, "Tirofijo", con más de 40 años de guerra contra el Estado, hasta donde se conoce continúa al frente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia. (AP)