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 miércoles, 08 de febrero de 2006  
Piden actualización de aranceles y medidas impositivas
Clínicas y sanatorios alertan sobre la crisis en el sector
Es por el aumento de los costos. Anunciaron que trasladarán el reciente incremento salarial

La asociación que nuclea a las clínicas y sanatorios de todo el país denunció la grave crisis que afronta el sector y reclamó al gobierno nacional medidas arancelarias e impositivas destinadas a compensar el aumento salarial firmado con el gremio de sanidad en diciembre pasado. La entidad señaló que frente al aumento en el costo de los insumos y laborales, los precios de los prestadores médicos permanecen prácticamente inalterables desde la devaluación, lo cual terminará por afectar la calidad de los servicios. En tal sentido,anunciaron que trasladarán a los financiadores (prepagas y obras sociales) el incremento del 30% promedio pactado en el nuevo convenio laboral.

Un comunicado de la Asociación de Clínicas y Sanatorios privados de la República Argentina (Adecra) advirtió que, a un mes del acuerdo salarial firmado con el gremio de Sanidad, "el 40% de las instituciones privadas no puede afrontar el aumento". Por ello, mientras espera "soluciones impositivas" por parte del gobierno "trasladará el aumento del 30% a todos los financiadores".

Fundamentalmente, el reclamo de las clínicas y sanatorios privados apunta hacia el gobierno y los financiadores. Involucra la falta de actualización de aranceles y el incumplimiento de una serie de medidas impositivas que las autoridades se habían comprometido a adoptar en ocasión de firmar el convenio salarial del sector.

Las clínicas y sanatorios esperan obtener un régimen de facilidades de pago en cuotas que no superen el 1% de la facturación y poder utilizar el crédito fiscal no computable de IVA para el pago de las contribuciones patronales, con el fin de congelar la deuda del sector con el fisco que hoy supera los 600 millones de pesos.

Una encuesta realizada por Adecra durante 2005 muestra que la mitad de los establecimientos no cumple con todas sus obligaciones impositivas. La emergencia sanitaria, que impide ejecuciones de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), le brinda este paraguas pero "lejos de ser una solución de fondo sólo permite patear para adelante y acrecentar la deuda tributaria".


Ingresos brutos
Pero los reclamos impositivos no sólo se direccionan al gobierno nacional. Eduardo Javkin, presidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Rosario, recordó el pedido a la provincia para que reduzca la alícuota del impuesto a los ingresos brutos, actualmente del 3,5%. Señaló que esa iniciativa llegó a plasmarse en un proyecto de ley que obtuvo media sanción del Senado, pero que fue "frenado" en Diputados "por indicación del Ejecutivo santafesino".

La asociación local reúne a unas 20 clínicas y sanatorios, con una capacidad de alrededor de 2 mil camas, que, según indicó Javkin, están trabajando en la mayoría de los casos a pérdida, "recostándose en el no pago de los impuestos y con atrasos a los médicos y proveedores".

El tema arancelario es otro de los puntos que preocupa a los prestadores y, en esa línea, desde el año pasado vienen trabajando junto a la cámara que agrupa a las empresas de diagnóstico para obtener del gobierno nacional la convocatoria a una comisión paritaria que permita actualizar los precios que pagan prepagas y obras sociales por las prestaciones.

Según Adecra, mientras los precios que las prepagas cobran a sus asociados subieron en promedio un 51% y la recaudación per cápita de las obras sociales creció un 74%, el precio que reciben las clínicas por los servicios de salud se incrementó aproximadamente un 27%.

Según Javkin, en Rosario esta "distorsión de precios relativos" es mayor debido a la menor proporción de afiliados de prepagas, que atienden al universo de ingresos más altos. "De 2 millones de afiliados de prepagas, el 80% está en Buenos Aires", explicó y aclaró que en el interior "predominan las prestaciones relacionadas con obras sociales y al Pami".


Aumento de costos
El telón de fondo de esta situación es el aumento de los costos del sector, que en un 35% quedaron atados a valor del dólar. Según Adecra, entre fines de 2001 y octubre pasado, el precio de los insumos médicos se incrementó en promedio 150%. Este rubro elevó su participación en la estructura de costos de las clínicas, del 16% al 20% del total.

En cambio, el peso de los salarios, aunque sigue representando más de la mitad del costo de los establecimiento, bajó del 60% al 56%. Esta disminución, aclara la asociación, "no significa que los sueldos no hayan aumentado sino que, por el contrario, los incrementos se afrontaron a pesar del mayor gasto en insumos".

El ajuste, dice el informe, se realizó sobre la cantidad y calidad de los insumos comprados, que cayó 27% respecto de 2001. Es decir, el sector "hoy compra menos medicamentos y menos descartables, menos análisis de laboratorios, menos placas de rayos, etcétera", mientras que realiza "un esfuerzo para mantener el poder adquisitivo de las remuneraciones de sus recursos humanos".

En ese marco, las clínicas y sanatorios consideran necesario "restablecer una equivalencia entre el monto de los aranceles médicos, los costos de los insumos físicos y las expectativas salariales".
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