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 martes, 07 de febrero de 2006  
Holanda aceptó que Argentina participe en el juicio Monsanto

El gobierno informó que la justicia de Holanda aceptó su pedido de participar en el proceso legal que la firma Monsanto inició en esa nación europea a importadores de soja del país sudamericano en un caso que investiga violación a los derechos de patente.

En tanto, los senadores Silvia Giusti y Roberto Urquía indicaron que "las demandas planteadas por la empresa Monsanto en tribunales europeos para cobrar regalías sobre la soja producida en la Argentina afectan a los productores agropecuarios y atentan contra los intereses del país".

"La batalla que lleva adelante el Poder Ejecutivo a favor de la producción y de la biotecnología es fundamental para el desarrollo de nuestra economía" indicó la declaración de apoyo al gobierno nacional ante los reclamos de la multinacional firmada por ambos legisladores justicialistas, de las provincias de Chubut y Córdoba, respectivamente.

La empresa "obliga a detener embarques en los puertos europeos, invocando un falso derecho de cobro de patente sobre los productos derivados de la soja RR (Round-Up Ready, resistente al herbicida glifosato)" porque "pretende cobrar regalías con retroactividad" a pesar de no haber patentado nunca el producto en el país.

Los legisladores recordaron que las patentes europeas invocadas por la multinacional estadounidense no alcanzan al grano ni a la harina de soja exportadas por Argentina pero la detención de los embarques, aunque luego sean liberados por la misma Justicia genera incertidumbre en el importador extranjero y aumenta los costos operativos con quebranto para los operadores del país.

En junio, la compañía demandó a importadores de Dinamarca y Holanda para hacer cumplir la ley de patentes de su tecnología Roundup Ready (RR), que está registrada en esos países y no en Argentina, donde casi toda la producción proviene de variedades RR que no son pagadas por los agricultores. Según estimaciones oficiales, el 30 por ciento de los productores argentinos compra la soja transgénica en el mercado negro y evita el pago de regalías.
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