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domingo,
05 de
febrero de
2006 |
HISTORIAS
El Banco Municipal
cumplió 110 años
En el irregular marco en el que se desarrollaba el incipiente sistema financiero en la Rosario de fines del siglo XIX, se fue imponiendo poco a poco la necesidad de crear una institución de carácter oficial destinada a facilitar el desenvolvimiento económico de los sectores menos pudientes, para resguardarlos de la usura encubierta.
En 1874 sólo el Banco Provincia de Santa Fe acordaba el otorgamiento de préstamos menores, aunque no a nivel popular sino destinados a lo que hoy podría denominarse "la pequeña industria". La oferta incluía créditos desde 200 pesos fuertes, "a artesanos con garantía de personas de reconocida solvencia", haciendo reaparecer así a los "fiadores".
Fue entonces que por iniciativa del intendente Floruardo Grandoli, el 1º de febrero de 1986 nació el Banco Municipal de Rosario, aunque la propuesta que fue aprobada por el grupo asesor administrativo que hacía las veces de Concejo Deliberante mereció un debate arduo y profundo.
Es que quienes querían llevar adelante la iniciativa por considerarla impostergable chocaban con quienes tenían fresca la memoria de una deficitaria situación financiera atravesada por la comuna. Nadie se oponía al proyecto por no considerarlo apropiado o útil, pero ante la incertidumbre sobre la existencia real de los fondos suficientes para llevarla a cabo algunos concejales preferían el aplazamiento.
No obstante, luego de una larga sesión el Concejo Deliberante sancionó la ordenanza "Carta orgánica del banco municipal de préstamos y caja de ahorros", que constaba de 25 artículos. Sus dos principales características, banco de préstamos (Monte Pío) y caja de ahorros estaban expresadas en el artículo primero, estableciéndose que los préstamos no podían ser inferiores a un peso. Todo un dato revelador de la precariedad de medios de la gente a la que la entidad procuraba asistir con sus operaciones.
Finalmente el 6 de febrero de 1895, Grandoli le estampó el "cúmplase" a la ordenanza, lo que también fue apoyado por el nuevo intendente, Alberto J. Paz. Mientras que el 28 de octubre de 1895 el Concejo Deliberante prestó acuerdo para integrar el primer directorio, que lo conformaron Santiago Correa, como presidente; Juan José Benegas, Juan Cabanellas y Juan M. Bigorday como vocales y Valentín Carnicero como gerente.
El banco abrió sus puertas el sábado 1º de febrero de 1896, en un local ubicado en calle San Juan 755/63, ocasión en la que se realizaron cinco operaciones pignoraticias de 225 pesos y en caja de ahorros cuatro depósitos por 20 pesos.
Antes de cumplir su primera década de existencia, en 1905 el banco dio un paso significativo, al adquirir el terreno ubicado en la entonces calle Libertad -hoy Sarmiento- donde se levantaría más tarde la importante sede, ámbito de desempeño de la entidad hasta 1980.
En tanto, en 1912 se autorizó, por reforma de su carta orgánica, a recibir, además de los depósitos en caja de ahorros, depósitos en cuentas corrientes y a plazo fijo. Además, el 14 de mayo de 1940, mediante ordenanza Nº 31, la intendencia municipal dispuso el cambio de denominación, convirtiéndose desde entonces en el hasta hoy Banco Municipal de Rosario.
Otra fecha clave llegaría en 1986, cuando el banco inauguró su moderno y funcional edificio sede de su actual casa central, en calle San Martín 730.
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