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domingo,
22 de
enero de
2006 |
Otra forma de mirar
Chachi Verona / La Capital
Conocí a Julián Usandizaga en su muestra en el Parque España en el año 2003, y eso me permitió acercarme a él como persona y artista. Después de muchos años de dibujar y trabajar de manera autodidacta comencé a concurrir a su taller, algo así como el planeta Usandizaga, un gran ambiente rodeado de grandes plantas y enredaderas. En ese lugar alejado de los reflectores de la fama, descubrí un espacio donde el docente genera un clima de trabajo y aprendizaje que yo nunca había experimentado.
Julián es una persona sensible y observadora que no duda en transmitir con claridad sus enseñanzas, de un modo generoso. En sus clases, a partir de una consigna plástica a resolver, mientras vamos depositando el grafito del lápiz sobre una hoja, las ideas fluyen continuamente y se analizan desde distintos puntos de vista, siempre enriquecedores, guiados por su conocimiento y su mirada crítica.
Entre muchas cosas, descubrí otro modo de mirar el mundo, proyectado sobre una pantalla, como si todos los objetos y seres que vemos fueran perdiendo su volumen, se aplanaran y se adhirieran a una hoja de papel, transformándose en figuras y fondo, articulándose de otra manera, dando forma a otro sentido en la observación.
Veo en Julián a un trabajador incansable, con ideas muy claras, valores y principios, independiente de los discursos de moda. Me parece muy oportuno el reconocimiento de la Universidad Nacional del Litoral hacia alguien que es un maestro, un virtuoso dibujante y un gran tipo.
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