Historias

Prebisch y el ingreso al FMI

Gobernaba el general Pedro Eugenio Aramburu, el segundo de los presidentes golpistas de la autodenominada Revolución Libertadora, cuando en la noche del 12 de enero de 1956 la cadena oficial sirvió para que el economista argentino Raúl Prebisch se dirigiera al país planteando la necesidad de un giro copernicano a los lineamientos trazados durante la presidencia de Juan Domingo Perón. En sus primeras charlas planteó un panorama desolador, plasmado en tres documentos en los cuales, entre otras cosas, recomendó sumarse a las filas del Fondo Monetario Internacional (FMI). Fue en agosto de 1956.

Prebisch, un tucumano nacido en 1901, fue durante catorce años presidente del Banco Central de la República Argentina y regenteó la Comisión Económica para América latina (Cepal). Antes de los 30 años fue asesor de Hipólito Yrigoyen; y luego colaboró con distintos gobiernos, terminó su carrera asesorando a Raúl Alfonsín en 1983.

Su manejo moderno de las políticas anticíclicas logró que sus pares lo respetaran. "El Prebisch de esta época fue el gran timonel para capitanear el barco en la Gran Depresión del 30", dicen los historiadores.

Sus teorías hicieron posible, de algún modo, escapar a los ciclos de sube y baja de la economía, pero no de los vaivenes cíclicos del revisionismo y "la Justicia de la historia". Conflictos y desentendimientos con los gobiernos argentinos lo impulsaron a los organismos internacionales. En 1949 se incorporó a la Cepal y desde allí difundió su tesis de centro y periferia, en la que afirmó que existe una tendencia secular al deterioro de los términos de intercambio de los países subdesarrollados.

Fue socialista de joven, luego neoclásico y la crisis del 30 le sirvió para "recapacitar", según dijo en distintas notas. Era "un liberal" para los peronistas, que nunca perdonaron su "Informe Prebisch". Más tarde el intelectual se arrepintió de aquel escrito.

Arturo Jauretche, un pensador y economista de la época pre y post peronista delineó una crítica hacia Prebisch y sus ideas para la Argentina de mediados de siglo: "El plan Prebisch significará la transferencia de nuestra riqueza y de nuestra renta hacia las tierras de ultramar. Los argentinos reduciremos el consumo, se elevará el costo de vida y vendrá la desocupación. De esta manera, no solamente aumentarán nuestros saldos exportables, sino que serán más baratos para afuera. Nuestra industria, que se sustentaba en el consumo de las masas se liquidará", dijo Jauretche y el siglo pasó y dejó huellas. Desde la ortodoxia se lo acusó de promover la inflación con políticas fiscales y monetarias irresponsables. Los economistas Manuel Fernández López y Aldo Ferrer -su discípulo- creen que este aspecto fue exagerado por sus enemigos intelectuales de la derecha.