Polémicas consecuencias de una ley de los noventa

Jubilaciones: incertidumbre en los docentes técnicos transferidos

Son profesores que antes pertenecían a la Nación. Pasar a la provincia no fue sin consecuencias a la hora de pensar en el beneficio de la jubilación

Los docentes de escuelas técnicas transferidas reclaman que se revise el sistema por el cual se les calcula lo que cobrarán a la hora de jubilarse. Según advierten, lo que podría ser un justo derecho se ve limitado por la falta de normativas claras y de voluntad política para dar un cierre definitivo a este reclamo.

Esta demanda tiene su historia, que se inicia con la transferencia de las escuelas nacionales a las provincias, un hecho que no pasó sin consecuencias para alumnos, docentes y las mismas instituciones.

La ley -promulgada a principios de los noventa- trajo aparejada, entre otros desajustes, una situación de injusticia para cientos de docentes que ahora aspiran a jubilarse.

Entre ellos están los transferidos de escuelas técnicas, cuya realidad se vio afectada por los cambios y modificaciones en su situación de agentes del Estado que a lo largo de estos años se han dado por medio de decretos, normas y resoluciones.

Según explicó a LaCapital un grupo de estos profesores, jubilarse parece ser un trámite de nunca terminar. Es que si bien rige sobre este beneficio el principio de caja otorgante, es decir aquella donde el docente acredite la mayor cantidad de aportes, lo cierto es que la aplicación de este principio los perjudica cuando se trata de sacar las cuentas sobre cuánto percibirán al momento de cobrar su jubilación.

Consultada sobre cómo trabajan los diputados provinciales para atender a este reclamo, la vicepresidenta de la comisión de Educación de Diputados provincial, Verónica Benas (ARI), indicó que el mayor problema reside en que no se les reconoce en la jubilación de la Nación las sumas no remunerativas, algo que la nueva ley previsional aprobada en Santa Fe en septiembre pasado sí contempla.

En rigor, la diputada entiende que lo razonable sería hacer una excepción -como ya ha ocurrido con otros agentes del Estado- para este sector, que no supera a los 600 docentes. Esto consistiría en que la provincia comunique a la Nación cuál es la diferencia en sumas no remunerativas y que la Ansés debería considerar al momento de liquidar el haber previsional. O bien que también de manera excepcional se jubile a los docentes transferidos por la caja provincial reconociendo los mejores haberes y aportes. Igual, Benas definió a la situación como muy compleja e injusta, "producto de una ley -por la de transferencia- que se aplicó sin anestesia".

Por su parte, el grupo de profesores pide atención y que se les contemple la jubilación justa. Recordó que los problemas comenzaron cuando, en 1994, Carlos Menem derogó la ley Nº 24.016 sobre el régimen especial para docentes. Más tarde el Congreso restablecería la vigencia de esta ley, reconociendo el 82 por ciento del activo, pero sin la movilidad. Los problemas volvieron entonces a comenzar.

Por si fuera poco, la nueva ley aprobada en la provincia de Santa Fe no contempla a los docentes transferidos.

Los profesores también recordaron que un proyecto de ley del diputado socialista Alfredo Cecchi propicia que los docentes transferidos desde la Nación y que acrediten como mínimo 10 años de aportes a la Caja de Jubilados y Pensionados de la provincia tengan a su favor la opción de acogerse a los beneficios de la ley jubilatoria provincial. Sin embargo, entienden que para que esto sea aplicable deberá anteponerse una serie de recursos. Lo cual define un panorama más que complejo para estos docentes que comenzaron su carrera en escuelas nacionales.