La industria cierra el año con un crecimiento del 7,5%

La actividad manufacturera en la Argentina culminó este año con un nivel de crecimiento del orden del 7,5 por ciento, y de esa manera completó su tercer año consecutivo de expansión, aunque a menor ritmo que en los dos períodos

anteriores.

En efecto, en 2003 la producción del conjunto de fábricas nacionales logró experimentar un salto desproporcionado del 16,2 por ciento al salir de la crisis de la devaluación, mientras que en 2004 moderó el paso al acumular un avance del 10,3 favorecida por un cierto efecto de arrastre.

En 2005, la actividad comenzó a moderar su marcha al terminar en el orden del 7,5 según proyecciones realizadas sobre datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) de los primeros once meses.

De acuerdo con economistas, va a ser muy difícil que la industria vuelva a tener cifras de crecimiento de dos dígitos, y lo más lógico será que se mantenga en niveles algo inferiores al promedio del año que está por terminar.

Durante los doce meses pasados, el sector industrial estuvo operando al menos al 70 por ciento de su capacidad instalada, y según indica la encuesta cualitativa del INDEC casi el 46 por ciento de los empresarios piensa incrementar su parque productivo en 2006.

El año que culmina significó claramente un despegue para la actividad automotriz que logró crecer casi un 30 por ciento respecto del año pasado hasta llegar al piso de 300 mil unidades al año, número que es considerado por directivos del sector como el mínimo como para sostener la actividad de las fábricas.

El crecimiento de la industria automotriz estuvo sostenido por la demanda interna y por las exportaciones que absorbieron el 30 por ciento de la producción local.

Otros sectores industriales que crecieron en 2005 entre el 15 y el 20 por ciento fueron carnes blancas, neumáticos, azúcar, y aceites y subproductos, mientras que arriba de ese rango estuvieron cemento y otros materiales de la construcción.

En tanto, los sectores que mostraron caída de la producción fueron cigarrillos, con cerca del 9 por ciento; fibras artificiales, 3; vidrio, 2 y aluminio, harina de trigo y petróleo procesado menos del 1 por ciento. (DYN)