Una colonia de murciélagos genera muchos problemas

Una colonia de murciélagos tiene a maltraer a los vecinos de Cochabamba al 1300. Desde hace varios meses padecen la invasión en sus viviendas de los mamíferos que habitan un galpón en ruinas, desde donde emana un olor nauseabundo. La presencia de la colonia provoca temor por la posible transmisión de enfermedades por acumulación de guano (excremento). Pero desde el Departamento de Control de Vectores de la Municipalidad aseguran que la especie "no es transmisora de enfermedad", aunque evaluarán su comportamiento.

Sobre el mediodía de ayer, una empresa de control de plagas ya había comenzado la erradicación y traslado de los murciélagos, que demandará al menos una semana.

Terrazas clausuradas, claraboyas, aire luz y taparrollos tapados con diarios, son algunas de las precauciones que deben tomar los residentes de las casas de la cuadra delimitada por Cochabamba, Corrientes, Entre Ríos y Cerrito, para que los murciélagos no los invadan.

"Vivimos encerrados. Aparecen de a cientos en el baño, en la cocina, en todos lados", se quejó Yolanda, una mujer que vive en la casa lindera al galpón y está aterrada por un posible ataque de los mamíferos.

Los vecinos contaron que en el lugar "funcionaba una droguería que luego se mudó, y el local quedó abandonado. Hace unos días comenzaron a demolerlo y los animales no paran de salir". En el inmueble hay un tinglado, montañas de escombros, tirantes y restos de mobiliario.

En tanto, a primera hora de la mañana de ayer se hizo presente el director de Control de Vectores de la Municipalidad, Jorge Dañil, quien hizo una evaluación y estimó: "Si bien es cierto que la presencia de murciélagos es molesta y el olor a excremento es inaceptable, se pudo determinar que la especie presente no es transmisora de una enfermedad". Y consideró oportuno hacer "un seguimiento de su comportamiento para ver si hay alguno herido, por el tema de la rabia".