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 miércoles, 28 de diciembre de 2005  
Oferentes. Con un presupuesto de más de 85 millones de pesos se abrieron los sobres de la licitación
Concluirán las obras de defensa en el oeste de la capital provincial
Las tareas son para prevenir posibles desbordes del Salado y evitar el ingreso del tránsito pesado a la ciudad

Carlos Roberto Morán / La Capital

Santa Fe.- Cuatro empresas se presentaron para la segunda etapa de la avenida de Circunvalación oeste y acceso norte a esta ciudad de Santa Fe. La ambiciosa obra tiene un presupuesto asignado de 85.600.000 pesos y tiene la doble finalidad de prevenir los posibles desbordes del río Salado y evitar que el transporte pesado ingrese al ejido urbano.

El ministro de Obras y Servicios Públicos, Alberto Hammerly, consideró al emprendimiento como "sumamente importante", dado que completará la traza de defensa que se está haciendo en el tercer tramo que protege tanto Santa Fe como la vecina ciudad de Recreo y significará además la pavimentación de los terraplenes que se levantaron en la primera etapa de la obra.

El funcionario, que se encontraba acompañado por el administrador general de Vialidad provincial, Antonio Grbavac, expresó su satisfacción porque la mayoría de las empresas oferentes cotizaron por debajo del presupuesto oficial. Explicó también que están concluidos un terraplén y una defensa hasta el denominado "canal del turco", ubicado al norte de Recreo. La obra, una vez terminada, permitirá empalmar el tramo uno y dos que llega hasta el acceso a Santa Fe en la autopista que la une a Rosario y también llega hasta el viaducto que comunica Santo Tomé con la misma Santa Fe, todo lo cual permitirá que el tránsito pesado no tenga ninguna penetración dentro de la ciudad capital.

Para los nuevos trabajos se presentaron a la licitación cuatro empresas: Super Cemento, JCR, Obring y Rovela Carranza cotizaron por 78.925.042 pesos; Dycasa SA lo hizo por 96 millones de pesos; Decavia, Helport y Homaq fijaron su cotización en 85.500.000 pesos, y Rovial SA, Alguimac SRL y Néstor Guerechof lo hicieron por 79.740.159 pesos. "Estas cotizaciones reflejan que los presupuestos oficiales están bien hechos y reflejan la realidad y también que hay empresas en la provincia que contribuyen a que se puedan realizar las obras", ponderó el ministro.

Consideró Hammerly que se trata de la obra "más importante" para Santa Fe entre las que la gestión de Jorge Obeid ha puesto en marcha y, en ese sentido, destacó que al mismo tiempo que el emprendimiento servirá para defender a la ciudad de posibles inundaciones del Salado como para evitar que los vehículos de gran alzada transiten por el ejido urbano. Esto permitirá dar fluidez a la avenida Blas Parera que empalma con la ruta nacional 11, en el extremo norte de la ciudad y que en la actualidad reiteradamente se colapsa por la gran cantidad de camiones que la transitan.

En esta segunda etapa se harán otros trabajos que complementan los detalles de seguridad tales como la señalización horizontal y vertical, la iluminación en toda la extensión del proyecto, y la colocación de barandas metálicas de defensa. Las calzadas a construir empalmarán con las existentes construidas en la segunda sección de la avenida de Circunvalación oeste.

Será en definitiva una autopista que unirá calle Gorostiaga con la ruta 70, entre Esperanza y Santa Fe y a partir de allí habrá una ruta de dos manos que llevará al acceso a la ruta nacional 11, al norte de la ciudad de Recreo.

El proyecto original de esta obra contemplaba la realización de una sola calzada en una primera etapa, aunque ya se había previsto que esa sería parte de una futura autopista de dos calzadas separadas.

Los terraplenes que se construyen se levantarán hasta la cota de defensa establecida para las crecientes extraordinarias del río Salado. Esa misma cota, en esta segunda etapa, se transforma en rasante del pavimento. En el tramo final, el terraplén vial se separará del terraplén de defensa proyectado en la primera etapa. Además se han proyectado tres intercambiadores de tránsito tipo diamante en las intersecciones con las calles Estado de Israel, Teniente Loza y Monseñor Rodríguez.

El proyecto ejecutivo de este último deberá ser realizado por el contratista, de acuerdo con las instrucciones y exigencias establecidas en el pliego correspondiente. En los tres intercambiadores las calzadas principales pasarán en altonivel sobre las calles mencionadas. También se ha proyectado un intercambiador de tránsito, el más importante del proyecto, en la intersección con la ruta 70.

Es un intercambiador tipo trébol de cuatro hojas, con los cuatro "rulos" de giros a la izquierda, y los cuatro ramales de giros a la derecha. En el proyecto se establece también que las calzadas principales del proyecto pasen en altonivel sobre la referida ruta.

Ademas, se ha previsto un empalme canalizado a nivel con la ruta 11, al final del trazado de esta segunda etapa y también se ha proyectado la construcción de nueve puentes de 1,40 metro de altura y 25,80 de largo, ubicados sobre diversas arterias.
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Las obras de defensa son para prevenir posibles desbordes del Salado.


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