Reducción polémica. Fernández justificó el enojo de Cristina con el vicepresidente

El gobierno también le apuntó a Scioli

Dijo que los "errores" del titular del Senado parecen tener intencionalidad política. Duro ataque al periodismo

El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, tuvo un día de furia dialéctica: justificó el enojo de la senadora Cristina Fernández con el titular de la Cámara alta, Daniel Scioli, advirtió sobre la responsabilidad del vicepresidente en "errores" que "parecen tener otra intencionalidad" política y lanzó un furibundo mandoble contra el periodismo.

Fernández dijo que "los errores, cuando aparecen impresos" en los medios, "no parecen tan errores, sino parecen tener otra intencionalidad".

El jefe de Gabinete se refirió así a la polémica protagonizada el jueves por la primera dama cuando en plena sesión del Senado, acusó a Scioli de hacer circular la versión de que había sacado al socialista Rubén Giustiniani de la comisión de Asuntos Penales para que ella ocupara su lugar.

"Nada de eso ha pasado y hoy el secretario administrativo (de la Comisión) dice haber sido autor de la acción", aclaró Fernández.

Scioli se limitó ayer a transmitir a través de su vocero: "No voy a hacer declaraciones. De mí sólo pueden esperar trabajo, prudencia y dedicación".

El vicepresidente le pidió al secretario parlamentario del Senado, Juan Estrada, que explique lo ocurrido. Cristina de Kirchner le atribuyó "desconocer el reglamento" de la Cámara y deslizó la posibilidad de que haya incurrido en "falsedad ideológica".

Este no es el primer enfrentamiento que protagoniza Scioli con el gobierno de Néstor Kirchner. A pocos meses de asumir Kirchner en el gobierno, el ex motonauta -que ocupaba también la secretaría nacional de Turismo desde el anterior gobierno de Eduardo Duhalde-, fue desplazado de ese cargo tras formular declaraciones a favor del aumento de tarifas.

Desde entonces, aunque las relaciones habían mejorado, Scioli se limita a reemplazar al presidente cuando se va de viaje al exterior y cumple diariamente sus funciones en la sede de la Cámara alta.

Fernández no se quedó en las críticas a Scioli y la emprendió contra el periodismo: "Los medios no tienen el peso de antes, están en retirada y cada vez pesa menos la opinión de los periodistas en la gente".

Fundamentó esa idea en el hecho de que el presidente obtuvo una gran adhesión en las últimas elecciones, sin haber mantenido la tradicional costumbre de conceder conferencias de prensa o entrevistas.

Negó, asimismo, que haya "medios anestesiados, u operados" desde la casa Rosada y afirmó que su "impresión" es que "los medios no tienen el peso de antes".

Reflexionó, aludiendo a la senadora Cristina Fernández, a la que también se le reprocha no dialogar con la prensa, que "una candidata que nunca habló con los medios haya ganado con 30 puntos" de ventaja, y agregó que "muchos piensan que la gente sólo puede conocer lo que yo pienso si hablo con el periodismo, pero no es así".

Cuando se le apuntó que Kirchner no dialoga con la prensa pero sí se presta a responder a cómicos como en los programas televisivos CQC y Showmatch, Fernández aclaró que "el presidente no participó del ciclo de Marcelo Tinelli para pasar un mensaje a la gente (sic). Participó del cierre de un programa".

"Los medios no tienen el peso de antes", dijo aníbal Fernández.