Revuelta en un penal de menores

Indagaron a cinco policías por apremios ilegales en el CAT

Entre los efectivos está el director del presidio, Silvio Porto, quien sin embargo sigue en su cargo

Cinco efectivos policiales, entre ellos el director del Centro de Alojamiento Transitorio (CAT), fueron indagados ayer por la jueza de Instrucción Mónica Lamperti por sus reponsabilidades en la revuelta ocurrida la madrugada de martes en el penal de Dorrego al 900. La medida judicial se dispuso luego de que el juez de Menores Jorge Cartelle les tomara declaración a 9 de los 21 menores que estuvieron involucrados en el incidente y que resultaron con lesiones de diversa gravedad. La valoración de esos testimonios, remitidos a la jueza de Instrucción, llevó a su par de Instrucción a tomarle declaración indagatoria a los policías que están sospechados por apremios ilegales.

A pesar de la medida judicial, una alta fuente de la Unidad Regional II sostuvo ayer que el comisario Silvio Porto, director policial del CAT, y los otros cuatro efectivos continúan en sus funciones "hasta que la jueza resuelva la investigación".

Más allá del hermetismo que rodea a los juzgados intervinientes y a la fiscalía a cargo de Norberto Picca, fuentes judiciales precisaron que "los cinco policías, Porto incluido, desfilaron por el despacho de la jueza Lamperti quien les tomó indagatorias bajo la figura de apremios ilegales". Esta medida fue confirmada por un alto jefe de la URII, que agregó: "Fue una ingadatoria sin ficha". Es decir, se los indagó pero no se los prontuarió. La fuente confirmó que el comisario Porto "continúa en su puesto y ahí seguirá hasta que la jueza tome una determinación".

Sobre lo ocurrido la madrugada del martes en el penal de Dorrego al 900 se conocen al menos dos versiones. En principio el incidente fue atribuido por el director policial del CAT a un motín de los adolescentes allí alojados que pedían por la aceleración de sus causas. Pero los menores aseguraron haber sido golpeados sin motivo ni mediación de un alzamiento previo por el propio Porto y sus guardias. Las lesiones sufridas por los adolescentes fueron constatadas por el médico judicial Carlos Elías. Además, vecinos de edificios de las inmediaciones aseguraron haber oído desgarradoras exclamaciones de los adolescentes, que sugerían una golpiza.

Por su parte Sergio Druetta, titular de la Dirección Provincial del Menor en Conflicto con al Ley de la que depende el CAT, precisó que los pibes "dijeron que fueron golpeados por los policías". El funcionario se hizo presente en el penal pocas horas de después del episodio y, tras reunirse con el juez Cartelle, reforzó la presencia de personal civil en la dependencia. "Según lo que nos trascendió a nosotros, habrían surgido contradicciones entre los dichos de los pibes", comentó la fuente policial. "A Porto sólo se lo va a mover de su puesto si la jueza encuentra elementos que certifiquen que pasó algo raro", comentó.

"De la carátula de la investigación (apremios ilegales) se deduce que con las actuaciones enviadas por el juzgado de Menores alcanzó para que la jueza Lamperti tuviera la sospecha suficiente para indagar", analizó una fuente de Tribunales. La magistrada aguarda ahora una pericia realizada por Bomberos Zapadores, quienes debieron intervenir para sofocar la quema de colchones y tendrán que explicar cómo se provocó el incendio. Según trascendió, esa pericia comprometería a los uniformados.

Uno de los pasillos del CAT.