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sábado,
24 de
diciembre de
2005 |
Fiestas de fin de año: festejos sin estrés
Según especialistas de la Clínica Mayo de Jacksonville, Florida, es perfectamente posible mantenerse alejado de los excesos y desgastes innecesarios durante fin de año y de esta manera comenzar el 2006 con la mejor disposición. Esta es una época de mucho movimiento y obligaciones que cumplir, pero no hay por qué dejar que éstas nos controlen.
Según James Craggs, consultor en salud mental de la Clínica Mayo de Jacksonville, Florida, es necesario establecer prioridades y balancear las actividades para garantizar la salud emocional. La manera en la cual decidimos encarar las presiones de fin de año es lo que determina nuestro nivel de estrés. Según Craggs, es posible decidir de antemano cómo balancear las actividades para mantenernos emocionalmente saludables pensando en cómo vamos a lidiar con situaciones familiares, planeando maneras de cuidar nuestro equilibrio físico y haciendo previsiones para los gastos de fin de año.
“Si se puede mantener la perspectiva y planificar un poco, se hará más fácil controlar situaciones difíciles”, enfatiza. “También debemos tener precaución de no ser demasiado indulgentes. Es fácil caer en malos hábitos y sentirse culpable después de Navidad, porque hemos comido, bebido o gastado demasiado. Es importante conocer nuestros límites y planificar con moderación”.
Consejos para reducir el estrés
Pequeños detalles pueden hacer una gran diferencia en el nivel de estrés:
Quédese donde está: si el viaje le va a complicar la vida demasiado, tal vez sea mejor quedarse en casa y celebrar en su hogar.
Establezca prioridades: decida cuáles eventos son más importantes usted, y excúsese de los demás. Esto significa saber decir “no” cuando haya que decirlo.
Deje que otro cocine: tome un descanso de la cocina de vez en cuando y salga a comer afuera, u ordene la cena ya preparada.
No trate de ser perfecta: nada ni nadie lo es, no intente estándares imposibles.
Planifique con tiempo: tanto para cocinar como para preparar un presupuesto para las compras de Navidad. Haga lo posible por trazarse un plan. Haga una lista que incluya tiempo para descansar y relajarse.
Evite los excesos: mantenga la comida, bebida y gastos bajo control. Establezca límites y manténgase dentro de ellos.
Simplifique el proceso de compras: si es posible, consiga una persona de confianza para cuidar los niños mientras hace sus gestiones, o tome un día de vacaciones para hacer sus compras durante la semana.
Pida ayuda: cuando necesite ayuda, hable con sus familiares y amigos.
Mantenga su sentido del humor: un poco de comedia ayuda a aliviar la carga.
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