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viernes,
23 de
diciembre de
2005 |
Desde 1995 funciona en la empresa un programa de educación de adultos
Primera promoción de
egresados de la EGB del Swift
Son obreros y empleados que terminaron su escuela gracias a un convenio entre el frigorífico y Educación provincial
Fabiana Monti / La Capital
Lo lograron y es un incentivo para sus vidas. Se trata de la primera promoción de empleados del Frigorífico Swift que finalizó el tercer ciclo de la EGB, gracias a un programa implementado por la empresa en convenio con el Ministerio de Educación de Santa Fe.
Rolando López, de 36 años cuenta que tuvo que dejar la escuela por problemas económicos. Después intentó seguirla pero le costaba mucho trabajar y estudiar. Era mucho el esfuerzo y poco el tiempo que le quedaba. Cuando la empresa le propuso continuar sus estudios a través de un programa que implementaba su Centro de Educación para Adultos, le pareció que era posible. Hoy cuenta orgulloso que el sacrificio valió la pena, tanto que es abanderado de esta primera promoción.
Jorge Migone, de 33 años, se ganó el lugar de escolta de la bandera. También debió abandonar la escuela a edad temprana. Empezar de nuevo en la empresa "le permitió abrir nuevas puertas". Ahora asegura: "Quiero seguir estudiando".
Darío, Jorge, junto con Liliana Acosta, Luis Córdoba, Juana Díaz, Rosa Galarza, Luis Segunda, Antonio Sosa y Mario Verdún se convirtieron en los primeros egresados bajo la modalidad de la EGB. Y lo celebraron con familiares, compañeros y amigos.
Un poco de historia
La promoción es el resultado de un proyecto que implementó la empresa en 1995. "Hace más de diez años teníamos un gran porcentaje de personal con diferentes tipo de analfabetismo y como consideramos la educación un pilar fundamental para el crecimiento del individuo y la sociedad, empezamos a enviarlos a distintos centros de alfabetización, pero veíamos que la gente no podía continuarlos", relató Carlos Fernández Souza, gerente de recursos humanos.
A partir de ahí se creó la Escuela de Adultos que comenzó a funcionar con un centro de terminalidad primaria a distancia y dos programas de alfabetización en la planta de Rosario. En el 2003, la escuela extendió su actividad hacia la formación general básica para los operarios y empleados, que incluye entre otras materias, clases de computación y de inglés. La modalidad es semipresencial, y los estudiantes cursan fuera del horario de trabajo cuatro horas semanales con un plantel de docentes y tutores. El título que obtienen tiene validez oficial.
Hoy las autoridades de la empresa están en tratativas para que el año próximo se implemente el polimodal. Y los egresados cuentan que si está esa posibilidad desean cursarlo.
Liliana Acosta, otra de las egresadas, relata que si bien le costó la matemática y el proceso no fue fácil, resaltó el apoyo que tuvieron de los docentes.
En ese sentido, Claudia Biassi, profesora de ciencias naturales explicó que trabajar en este tipo de experiencias requiere una dedicación distinta. "Hay que estar a la par del adulto, contemplando su cansancio, pero estas personas manifestaron todo el tiempo su responsabilidad y sus ganas. Por eso la estrategia fue respetar sus tiempos", indicó.
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Fotos
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Las egresadas del Swift en la ceremonia de graduación.
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