El Senado otorgó superpoderes a Obeid en el tema Aguas

Lo autorizó a aprobar la transferencia de acciones del grupo Suez

El gobernador Jorge Obeid pidió ayer inesperadamente superpoderes a la Legislatura para afrontar el futuro del servicio de agua potable y cloacas. El Senado se los concedió en un trámite sumario y a libro cerrado, y Diputados buscará hacerlo la semana venidera. Se trata de un proyecto de ley que autoriza al Poder Ejecutivo a aprobar la transferencia de acciones de Aguas Provinciales de Santa Fe que poseen Suez, Agbar e Interaguas (las tres empresas que se retiran de la concesión) y a toda otra acción que considere necesaria para garantizar el servicio.

El trámite quedó exclusivamente en manos de los senadores peronistas ante los radicales y socialistas que, sorprendidos, no sólo se negaron a votar favorablemente la iniciativa sino que pusieron el grito en el cielo y se abroquelaron en una advertencia que desde el 23 de octubre último parece tener un peso diferente: "Se trata de un contrato que puede ser sospechado de nulo y será revisado en el futuro", insistieron una y otra vez.

El ministro de Obras y Servicios Públicos, Alberto Hammerly, llegó poco después de las 11 de ayer al bloque de senadores del PJ, con cuyos integrantes mantuvo un encuentro reservado y dejó en sus manos el proyecto de ley que, cuatro horas más tarde, desataría la ira opositora pero demostraría que la mayoría peronista sigue aggiornada: todos los senadores oficialistas votaron en silencio con la sola excepción de Norberto Betique -que no estuvo- y de Juan Carlos Mercier, que pidió permiso para abstenerse y luego se retiró para retornar al recinto una vez que la vicegobernadora María Eugenia Bielsa declaró la media sanción al proyecto y lo remitió de inmediato a Diputados.


Radiografía del proyecto
La iniciativa consta de cuatro artículos aunque fue acompañada de un expediente de 323 fojas. Ello llevó a los opositores a fustigar recurrentemente a sus pares peronistas, acusándolos de que no sabían realmente qué estaban aprobando dado que entre las 11 y las 16 no pudieron tener tiempo material para leer toda la documentación.

Los oficialistas, se mantuvieron en silencio y escucharon duros embates de la oposición. Así, el radical Felipe Michlig habló de "cheque en blanco" y "mamarracho", y se quejó porque de los "117 meses de vigencia que tiene la concesión, 82 fueron de renegociación. Es decir, el 70% del tiempo, el contrato no estuvo vigente, Aguas no estuvo obligada a hacer obras y se ahorró un montón de plata", destacó. Las críticas también llovieron por parte de Patricia Sandoz y Aníbal Faccendini.

En el primer artículo de la ley "se autoriza al Poder Ejecutivo a aprobar la transferencia de la totalidad de la participación accionaria de Aguas Provinciales de Santa Fe S.A. de Suez, Agbar e Interaguas y/o de cualquier otro accionista" en el marco de la ley 11.220, pero es en el segundo y tercer artículo en el que se evidencian las amplias prerrogativas que se conceden al Ejecutivo, ya que también lo autoriza "a instrumentar y poner en ejecución un procedimiento de transición que garantice la efectiva prestación del servicio", ante el supuesto de que se produjera la ruptura de la relación contractual con la empresa. Y a esos efectos, el artículo tercero lo faculta "a constituir sociedades, fideicomisos, ejecutar obras, entre otras actividades que garanticen la prestación del servicio". Por último, el cuarto artículo crea una comisión de seguimiento que la oposición ayer descalificó al referir que sus pronunciamientos "no serán vinculantes".