Prueba de ADN para descartar que abusó de su hija

La ofreció el papá de una chica a la que, estando internada en un sanatorio, se le detectó una lesión genital

El papá de la adolescente en la que se detectó una lesión genital cuando estaba internada en la sala de terapia intensiva del Sanatorio de Niños se ofreció para que le realicen una prueba de ADN para deslindar su responsabilidad en el episodio. El cotejo genético se realizará con las muestras que quedaron en un pañal que usó la chica de 15 años cuando estaba en estado de coma en el centro asistencial y que fue secuestrado por la Justicia.

Según trascendió de fuentes judiciales, el ofrecimiento se debe a que el hecho fue denunciado por la institución como parte de una serie de presuntos abusos crónicos a la menor, por lo que desde un primer momento los apoderados del Sanatorio hicieron recaer la sospecha sobre la familia de la chica. Si bien nunca llegó a ser una acusación, el papá de la nena ahora quiere que cotejen su patrón genético para demostrar científicamente su desvinculación con el episodio.

El hecho fue dado a conocer por este diario el pasado mes de agosto pero ocurrió en enero último. J., una nena de 15 años que sufre el Síndrome de Turner, fue atendida en el Sanatorio de Niños desde que tenía 3. Entonces se le detectó un tumor en el cerebro y el 24 de diciembre de 2004 ingresó a ese centro asistencial para ser sometida a la quinta cirugía. La operación se realizó el 6 de enero de este año y cuatro días después una enfermera dio la primera voz de alerta. La chica tenía una hemorragia vaginal como consecuencia de un desgarro en el periné.

Ante el hecho, y después de que la menor fuera suturada para detener la hemorragia, autoridades del Sanatorio de Niños presentaron una denuncia ante el juez de Menores Jorge Zaldarriaga al detectarse "lesiones vaginales y anales crónicas" que hacían pensar en abusos sexuales. Por eso, cuando la menor fue pasada a una sala de terapia intermedia, se prohibió la presencia del padre en el lugar.

Desde entonces se planteó una disputa judicial en la cual los progenitores de J. sostienen que su hija fue abusada dentro del sanatorio. Y las pericias sostienen que eso ocurrió entre uno y tres días antes del 10 de enero. Poco después la Justicia otorgó la custodia de la nena a sus padres y la causa pasó al juez de Instrucción Jorge Eldo Juárez.

Este magistrado fue quien hizo lugar a la medida solicitada por el papá de J. y además invitó a todos los profesionales del sanatorio que declararon informativamente en la causa a que se presten voluntariamente para realizarse esa prueba. Para ello les otorgó 3 días de plazo para que se presenten en su despacho.

"Lo propusimos para deslindar responsabilidades", sostuvo la mamá de la chica ante La Capital, y especificó que el pañal donde quedaron las muestras fue entregado por el sanatorio al juez Juárez.