Costo de vida. Dura reacción del presidente por el aumento de la inflación en el rubro alimenticio

Kirchner advirtió a los súper que no se abusen del bolsillo del pueblo

Economía no logró cerrar el acuerdo para contener el precio de la carne, aunque sigue el diálogo

El presidente Néstor Kirchner reaccionó duramente por la suba de 1,4% en el precio de los alimentos durante el mes de agosto. Advirtió a los empresarios que "no se pueden abusar del bolsillo del pueblo", y apuntó en particular a las cadenas de supermercados. Tras esas declaraciones el presidente de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal), Alberto Alvarez Gaiani, aseguró que no prevé nuevos incrementos para los próximos meses, y responsabilizó a los productores de alimentos frescos por la suba del costo de la canasta básica.

Si bien la inflación de agosto mostró una desaceleración importante respecto de julio, ya que cerró en 0,4%, el índice de precios minoristas reflejó un aumento de 1,4% en el rubro de alimentos y bebidas, el más sensible al bolsillo de los consumidores.

Con ese dato, funcionarios del Ministerio de Economía y la Secretaría de Agricultura se reunieron con representantes del sector de ganados y carnes para cerrar un nuevo acuerdo que permita contener los precios del sector. Aunque ayer no hubo resultados, funcionarios oficiales se mostraron optimistas de que ese acuerdo se firme la semana próxima.

Mientras tanto, en un acto en la localidad bonaerense de Moreno, Kirchner afirmó que en la lucha contra la inflación "es hora también de que los que generan bienes y los que comercializan bienes, como los supermercados, entren a darse cuenta que no se pueden abusar del bolsillo del pueblo, y que este es un gobierno que va a estar al lado del pueblo cada vez que se quiera abusar del mismo".

El supermercadista Alfredo Coto, se limitó a contestar: "El presidente puede opinar lo que quiera, como nosotros hacemos con el gobierno".

El subsecretario de Programación Económica, Sebastián Katz, quien participó de la reunión con supermercadistas y empresarios del sector cárnico, aseguró que el gobierno apelará a "las acciones de política económica necesarias" para mantener a raya los precios, y evitar así que la inflación supere el límite anual del 11% al que aspira Economía.

"Creemos que hay espacio para que esto sea así y al mismo tiempo estamos dispuestos a adoptar las acciones de política económica necesaria, no vemos peligro de desborde por fuera de esa banda de ninguna manera, creemos que esto puede cumplirse", dijo Katz. En tanto, el secretario de Agricultura almorzó en el hotel Hilton con cuarenta empresarios de la Copal, liderada por el Alberto Alvarez Gaiani.

Según informó la entidad, los industriales "brindaron detalles de los planes de sus industrias y del sector en general para el año 2006", y reivindicaron el nuevo esquema de reparto de la cuota Hilton, el cupo de cortes "premium" de carne que se exportan a la Unión Europea (UE). No obstante, voceros de la Copal negaron que el almuerzo haya servido para hablar de la inflación de los productos de primera necesidad.

"En los alimentos industrializados no hubo grandes cambios, los grandes cambios fueron en productos frescos, y la verdura y fruta en especial, que aumentaron mucho", dijo Alvarez Gaiani.

Según el jefe de la entidad que nuclea a la industria alimenticia, "lo único que subió un poco (dentro de los productos manufacturados) fueron los lácteos", pero eso responde "a una cuestión estacional, porque con el frío hay menos leche". Para los próximos meses, Alvarez Gaiani advirtió que "los precios no van a subir, porque la demanda tampoco tira mucho más".

"Los valores están más o menos estabilizados, no veo problemas, si sigue habiendo aumentos de salarios se van a trasladar pero los que hubo hasta ahora ya se absorbieron, al igual que con el costo de la energía", concluyó el ex presidente de la UIA.

Hasta ahora, la estrategia oficial para contener el precio de los alimentos incluyó varios acuerdos de precios con sectores estratégicos y un aumento de retenciones para las exportaciones de lácteos, a fin de fomentar las ventas de esos productos en el mercado interno.

Más recientemente, el Ministerio de Economía fijó un peso mínimo de 300 kilos por cabeza para la faena de ganado vacuno, que apunta a incrementar la oferta de carne dentro del país, y reducir así su precio.

Esa medida se complementaría en los próximos días mediante un acuerdo entre toda la cadena cárnica -incluyendo a los supermercados- para fijar el valor de la media res, que opera como precio testigo para la mayoría de los cortes que consume la población.

El gobierno propuso la implementación de un mecanismo para que el precio de la carne vuelva a los valores de la segunda quincena de agosto, en caso que en septiembre se produzcan subas estacionales.

Las diferentes opiniones, que sacan a la luz la fuerte disparidad de criterios que hubo en la extensa reunión, quedaron expuestas cuando opinaron integrantes de entidades que destinan su producción a la exportación.

Héctor Salamanco, presidente de la Asociación de Industria Argentina de Carne, remarcó que la "reunión fue muy positiva" porque el "Ministerio de Economía propuso buscar una fórmula de acuerdo de precios voluntaria, que no quiere decir control de precios".

Según Salamanco, el acuerdo -que podría alcanzarse el próximo martes- permitiría que "en el caso de presentarse picos de volatilidad de precios se mantengan los valores de la segunda quincena de agosto".

El directivo, que focaliza su trabajo en la exportación, dejó en claro que cualquier pacto quedará subordinado a la "autodisciplina" empresaria y que no estará atado a ningún compromiso formal.

Kirchner: "El gobierno va a estar al lado del pueblo cuando quieran abusar de él".