Año CXXXVIII Nº 48845
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Escenario
Educación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 14/08
Mujer 14/08
Economía 14/08
Señales 14/08
Educación 13/08
Estilo 02/07

contacto

servicios
Institucional

 sábado, 20 de agosto de 2005  
El imitador presenta su primer unipersonal en el teatro Broadway
Cherutti: "Creo que tengo una garganta que puede hacer lo que quiere y que está intacta"
El humorista recreará las voces de intérpretes populares, cantará tangos e imitará al presidente

Pedro Squillaci / La Capital

No es muy fácil reunir a Sandro, Sergio Denis, Raphael y Julio Iglesias en un sólo espectáculo. Menos en una sola noche. Pero paradójicamente se los puede reunir en una sola persona. Y ese es Miguel Angel Cherutti, aquel imitador que alguna vez despuntó como el robot Pirucho en televisión y que compartió diez años en teatro de revistas junto a Nito Artaza y vedetes famosísimas. Ahora llega a Rosario para actuar en el teatro Broadway, hoy, a las 23.30, en una suerte de nueva etapa de su carrera. Hará tangos, imitaciones, y representará al mismísimo presidente Néstor Kirchner. El insiste que estará solo en el escenario. Pero con su garganta traerá a personajes populares que siguen acompañando a la gente.

-¿Qué es lo que atrae tanto de tus imitaciones?

-Yo hago imitaciones y no caracterizaciones, y creo que la gente disfruta mucho porque ve que una persona, a cara limpia, puede hacer muchas voces conocidas. Lo que la gente más me ha dicho es "¡pucha, qué buena voz que tenés!".

-¿Por qué no fuiste cantante entonces?

-Nunca fui de inventar nada y siempre cuidé mi personaje. Creo que supe mezclar mi voz con la idea de recrear otras voces, y comprobé que eso impacta. Me doy cuenta que tengo un don natural, una garganta que puede hacer lo que quiera y que gracias a Dios está intacta. Fijate que hice personajes femeninos muy fuertes, como el de Ginamaría Hidalgo cuando debuté con (Gerardo) Sofovich en "La Peluquería de Don Mateo", que fue lo que me marcó.

-Pero ahora te inclinaste también por el tango.

-Ahora tengo más de 40 años y el tango se me metió en la piel. Voy a mostrarlo un poco en el show de Rosario, que es parte de lo que hice en el Maipo Club, donde hubo cuatro músicos, una pareja de baile, catorce tangos populares, y una historia en cada tango con un humor muy sutil. Pero lo principal serán las imitaciones con mucha nostalgia y también mucha actualidad.

-¿El show tendrá alguna otra sorpresa?

-El termómetro que utilizo, que está andando muy bien en la gira, es el presidente de los argentinos, es un monólogo a cara limpia, sin máscara. Es más, no me meto ni con sus defectos físicos, ni nada, a lo sumo algún doble sentido muy sutil. Pero el "presi" es una persona que se exalta mucho últimamente (risas). Yo me lo imagino en la casa, en su entorno, y ahí es cuando la gente se divierte, con cosas de la actualidad, sin golpes bajos ni ideología, porque no es mi estilo.

-¿Alguna vez hiciste algún personaje que la gente no lo reconoció?

-Sí, totalmente, me pasó con Eros Ramazzotti, reconozco que no funcionó. Pero también te cuento otra cosa: cuando hago el Paz Martínez, con la canción de la telenovela de "Padre Coraje", no sabés el silencio que hay en la sala. Es increíble el respeto que genera el Paz Martínez.

-¿Sentís que lo aplauden a él o a vos?

-Muchas veces me han dicho que lo hago mejor que el cantante original. Otro que logra algo increíble es Sandro, y mirá que hay imitadores de Sandro, pero bueno, será porque trabajé con él y lo observé mucho, y quizá le conozco cosas que otros no. La gente ve a Sandro en Cherutti, de otra manera.

-¿Cómo lográs el popurrí de voces sin confundirte, cuando interpretás un tema con varios cantantes famosos?

-Esa mezcla da mucho efecto. En una época yo hacía un popurrí maravilloso que arrancaba con Julio Iglesias, Raphael, Favio, Ginamaría, el tano Pagliaro, Plácido Domingo, Paloma San Basilio hasta Alberto Castillo. Hacía "Cierro mis ojos", de Raphael, "El día que me quieras" o "Algo contigo", yo sabía en qué momento metía a cada uno. Hice tríos con Julio, Paloma San Basilio y Plácido Domingo, hice un dúo de Olga Guillot con Sandro en "Arráncame la vida", o Bocelli con Marta Sánchez, la pucha.

-¿Te lleva mucho tiempo interiorizar el personaje y buscar las inflexiones bocales?

-Yo no trabajo con video pero con el disco sí, después trabajo con una base mía, consola de sonido, mis auriculares, la pista original y un arreglador que hace años que está conmigo.

-¿Hay un inimitable para vos?

-Frank Sinatra, yo siempre respeté mucho a Albertito Locati porque lo hacía a la perfección, pero reconozco que no hay en el mundo muchos que lo puedan hacer bien. Son voces muy complicadas, con mucho arrastre de esa garganta con arena, que tenía Sinatra. Hablando de garganta con arena, me encantaría hacer a Cacho Castaña, que es más imitable y tiene mucha inserción popular.

-Definime en un concepto qué es la imitación para vos.

-Imitar es que yo pueda cambiarte la sonrisa, el problema que tengas ese día, hacerte divertir y darte energía. Por mi parte nunca hubiese imaginado haber desarrollado todo lo que desarrollé. Es el género más difícil y quedó demostrado porque hace décadas que no aparece uno o dos por año. No tiene una respuesta lógica, pero es así. Yo noto que no sé por qué pero en un momento me transformo en algo y tomo la piel de un personaje. Quizá fui tocado por Dios y en un pasado andá a saber qué otras criaturas vivieron en mí.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


cartelera
Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
El imitador dijo que este era el momento para largarse solo.

Notas Relacionadas
El robot de la peluquería


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados