Deberá indemnizar a su ex mujer por daño moral

La Justicia de Buenos Aires condenó a un hombre a pagar 30 mil pesos, como responsable de la separación

Un hombre deberá indemnizar a su ex esposa con el pago de 30.000 pesos, luego de haber perdido un juicio de divorcio controvertido en el que se demostró que causó daños morales y psicológicos a su pareja, según un fallo de la Justicia de la ciudad de Buenos Aires.

La decisión fue adoptada por la Sala F de la Cámara Civil, integrada por Fernando Posse Saguier, José Luis Galmarini y Eduardo Zannoni, quienes consideraron que la acción de divorcio prosperó por el "comportamiento que el marido dispensaba a la esposa". Los nombres de los integrantes de la pareja fueron mantenidos en reserva.

La demanda original había sido planteada por el esposo, quien imputó la culpa de la separación a su mujer por injurias graves y reclamó por el supuesto daño físico y moral que le habría ocasionado.

La esposa replicó con una demanda similar, en la que atribuyó a su marido, además de las injurias, el "abandono voluntario y malicioso del hogar".


Denuncia contra denuncia
El enfrentamiento, rayano en el argumento de la película "La guerra de los Roses", escaló hasta límites casi insólitos, pues el hombre contraatacó diciendo que su esposa había cambiado la combinación de la cerradura del domicilio conyugal, y describió conductas presuntamente alteradas desde el punto de vista psicológico.

Pero los jueces establecieron que si bien la mujer, según pericias, tendría una personalidad "de base con estructura neurótica y rasgos histéricos", ello "no implica que necesariamente le hubiese dispensado un trato injurioso a su marido".

El tribunal también desestimó que "el cambio de cerradura del hogar conyugal por parte de su esposa configuraría la causal de injurias", pues "si bien no cabe dudar" sobre la existencia de esa circunstancia, citó declaraciones de testigos que dijeron que la modificación se habría producido mucho antes de la separación y por una pérdida de llaves.

La desvinculación de hecho se produjo en octubre de 2002, pero el hombre denunció que no pudo acceder a la casa en febrero de 2003.

La cosa no quedó allí, ya que por esa circunstancia la mujer contragolpeó denunciando a su ex marido por intento de violación de domicilio, cargo que también fue desestimado.

Tampoco hubo abandono del hogar: para los jueces, existió un acuerdo de partes para que cada uno, tras la separación, viviera en un domicilio diferente.

"La acción de divorcio prospera por la causal de injurias graves y se funda en el comportamiento que el marido le dispensaba a la esposa durante el matrimonio", concluyeron los jueces, tras analizar el extenso expediente de divorcio.

Finalmente el hombre fue condenado a pagar la indemnización de 30 mil pesos más intereses "a la tasa pasiva promedio que publica el Banco Central", como consecuencia de haber sido considerado responsable de la disolución conyugal. (DyN y Télam)